Oficina de Comunicación, Universidad Nacional. AGOSTO 2023
Aprovechamiento de residuos, nuevos medicamentos y protección de cultivos, son algunas de las soluciones que brinda la biotecnología. Esta rama de la ciencia fue la que propició el desarrollo de las vacunas que nos permitieron volver a la normalidad tras la pandemia del covid 19. Científicos nacionales, entre ellos de la UNA, consideran que Costa Rica tiene potencial para aportar innovadoras soluciones a los problemas globales. Foto Joaquín Salazar
Costa Rica tiene como meta ser líder
en economía circular
Antonio Arroyo Álvarez /CAMPUS
antonio.arroyo.alvarez@una.cr
Con la intención de transformar el modelo de producción actual y promover el fortalecimiento económico, la competitividad y el bienestar social en Costa Rica, se presentó la Estrategia Nacional de Economía Circular (ENEC).
Esta iniciativa desarrollada con la participación de instituciones del sector público, privado, academia y organizaciones no gubernamentales, tiene como meta convertir al país en un líder en economía circular, innovación y sostenibilidad para Latinoamérica, por medio de un modelo de desarrollo económico sostenible y circular, para el año 2050.
Desde la Escuela de Economía de la Universidad Nacional, las académicas Marjorie Hartley y Rocío Hartley comparten un pronunciamiento respecto a la ENEC.
Un país como Costa Rica que tradicionalmente ha invertido en conservación y, más recientemente, se ha comprometido con iniciativas globales como la descarbonización y los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS), la economía circular representa un desafío y una oportunidad para continuar por el camino de la sustentabilidad ambiental, la equidad social y el crecimiento económico.
Los mecanismos lineales para la satisfacción de las necesidades han llevado a las sociedades a la extracción cada vez mayor de recursos agotables, generando inmanejables cantidades de residuos que impiden la resiliencia de los ecosistemas. La infraestructura para el manejo y gestión de estos residuos no crece al mismo ritmo que lo hace su cantidad, convirtiéndose así en una importante carga financiera para comunidades, gobiernos locales y nacionales. Al mismo tiempo, son una fuerte carga para los ecosistemas, que los han llevado al límite de capacidad de asimilación. De manera que los residuos generados por el estilo de vida actual son una enorme carga financiera para las economías, una pérdida de bienestar para las sociedades y el agotamiento y destrucción de los ecosistemas.
La transición hacia una economía que preserve el valor de los materiales y productos que se generan, reta a las economías a innovar en procesos para la transformación de las formas tradicionales de producción, consumo y distribución que están poniendo en riesgo a todas las especies que habitan el planeta.
Según la Escuela de Economía UNA, la circularidad de estos procesos se traduce en una reducción en el uso y consumo de materiales y energía que ingresa al sistema económico en forma de insumos. Además, la economía circular, al hacer un aprovechamiento más eficiente y eficaz de los materiales y residuos, contribuye a la reducción de los costos de producción y la protección de ecosistemas indispensables para la vida.
La transformación también desafía a la política pública; particularmente desde la política ambiental y fiscal se deben enviar las señales correctas para que los sectores productivos y sociales reorienten sus decisiones hacia una economía circular.
Avanzar hacia un modelo circular es una oportunidad para la transformación del paradigma económico y social actual. Es una oportunidad para que el país avance en el logro de ODS porque involucra todos los ámbitos de la vida; es decir, la producción, el consumo, el empleo, la educación, la cultura, los valores en su interacción con la naturaleza.
La implementación de la economía circular demanda de la participación de todos los actores sociales, incluyendo a las universidades, que deben aportar y acompañar a los diversos sectores para mejorar la información, recomendar estrategias, instrumentos y política pública que faciliten la transición exitosa de la economía circular.
La economía circular propone la creación de nuevas capacidades de los sectores y de las personas, además del desarrollo de conocimientos locales y nacionales para la transformación.
Pie de foto: La economía circular representa un desafío y una oportunidad para continuar por el camino de la sustentabilidad ambiental.
Foto: Shutterstock
Proponen revelar impacto humano en ecosistemas de la zona marino-costera de Santa Cruz
Cristian Chaves Jaén para CAMPUS
cristian.chaves.jaen@una.cr
Una investigación conjunta entre la Sede Regional Chorotega de la Universidad Nacional (UNA) y la Sede de Guanacaste de la Universidad de Costa Rica (UCR) busca revelar cuánto afectan las presiones antropogénicas la salud ecosistémica en la zona marino-costera del cantón de Santa Cruz de Guanacaste.
El proyecto, diseñado por el Centro de Recursos Hídricos para Centroamérica y El Caribe de la Sede Regional Chorotega (Hidrosec), con fondos del sistema de CONARE, busca comprender los desafíos ambientales y promover soluciones sostenibles de manera participativa con la comunidad y los actores sociales, y en favor de los ecosistemas costeros.
Para emprender el estudio, se busca determinar las presiones que generan la contaminación del agua, el impacto de la deforestación y del turismo no sostenible y otras actividades humanas. De esta forma se busca cumplir con el objetivo principal de identificar esas presiones antropogénicas específicas que impactan la salud ecosistémica en la zona marino-costera del cantón de Santa Cruz.
Puntos del muestreo
Una parte fundamental del estudio es la evaluación de la calidad higiénico-sanitaria del agua superficial en 10 diferentes playas de Santa Cruz: Estero Playa Potrero, Marina Playa Flamingo, Playa Flamingo, Playa Brasilito, Delta del Río Zapote, Estero Playa Conchal, Playa Grande, Estero Playa Tamarindo, Playa Tamarindo y Playa Langosta.
Para ello, se han realizado mediciones de parámetros físicos, químicos y microbiológicos para obtener información precisa de la salud del agua y detectar posibles fuentes de contaminación.
Además, se ha llevado a cabo un análisis de la percepción ambiental de los habitantes del sector costero de Santa Cruz en relación con el manejo de las aguas residuales y su impacto en la salud ambiental. Esta información es esencial para comprender las actitudes y percepciones de la comunidad local y orientar las estrategias de gestión y educación ambiental.
Alianza entre población y ASADAS
Álvaro Baldioceda, investigador del Hidrocec y encargado del proyecto, resaltó que con el proyecto ha puesto énfasis en fortalecer las capacidades de los actores sociales locales a través de la capacitación. “Los participantes han recibido formación sobre las principales presiones antropogénicas que afectan la zona y se ha promovido la construcción de agendas participativas para desarrollar soluciones sostenibles y fomentar la conservación de los recursos naturales”. Además, se ha fomentado la construcción de agendas participativas para desarrollar soluciones sostenibles, esfuerzo en el que destacó “la alianza que se ha generado entre la población y las ASADAS para lograr una gestión integral y colaborativa de los recursos hídricos”.
Tamara Cabalceta, ingeniera hidrológica de la UNA y estudiante de la Maestría en Gestión Integrada de Áreas Costeras Tropicales de la UCR y Alondra Salas, asistente en la carrera de Ingeniería Hidrológica UNA, participaron en la recolección de muestras de agua. Fotos Álvaro Baldioceda.
De la experiencia conjunta con las ASADAS y la comunidad, Baldioceda indicó que se espera que los resultados obtenidos sirvan como base para futuras iniciativas y acciones encaminadas a garantizar la salud ecosistémica y la sostenibilidad de la zona marino-costera y la protección del medio ambiente y el bienestar de la población.
Los resultados de este estudio serán fundamentales para desarrollar políticas y acciones dirigidas a garantizar la sostenibilidad de los ecosistemas costeros y promover un desarrollo humano en armonía con la naturaleza. Asimismo, se espera que los resultados obtenidos sirvan como base para futuras iniciativas y acciones encaminadas a garantizar la salud ecosistémica y la sostenibilidad de la zona marino-costera de Santa Cruz, concluyó Baldioceda.
Universidades e industrias impulsan innovación para el desarrollo socioeconómico
Científicos consideran que Costa Rica tiene potencial para aportar innovadoras soluciones a los problemas globales.
Roberta Hernández Q. / CAMPUS
rherna@una.cr
Ante los múltiples problemas que enfrentó la humanidad durante la pandemia, científicos de todas las áreas se unieron para plantear soluciones a la enfermedad que atacaba al planeta entero. La biotecnología fue el punto de encuentro que propició el desarrollo de las vacunas que nos permitieron volver a la normalidad; como este, son múltiples los problemas que se pueden solucionar a través de esta rama de la ciencia.
Aprovechamiento de residuos, nuevos medicamentos y protección de cultivos, son algunas de las soluciones que brinda este innovador sector. En Costa Rica, se desarrollan gran variedad de líneas de investigación, tanto en el ámbito académico como desde la industria. Por esta razón, cada dos años se desarrolla el encuentro Biolíderes: Articulando Negocios y Biociencias.
El auditorio Cora Ferro Calabrese de la Universidad Nacional (UNA), fue la sede de este evento en junio anterior. Empresarios, científicos, académicos y estudiantes se reunieron con el objetivo de visibilizar los avances del sector de biotecnología en el país. “Biolíderes es un programa que inició desde el clúster de biotecnología. Esta es su cuarta edición y congrega a toda la comunidad en biotecnología del país”, explicó Patricia Trinler, quien lidera el clúster y preside el Grupo Trisan; ella participó en el programa de televisión UNA Mirada donde se promovió la actividad.
Para Silvia Chávez Quesada, gerente de la empresa costarricense Florex, “un evento de esta naturaleza nos permite reunirnos, intercambiar, retroalimentarnos tanto a nivel de empresas como de academia; es absolutamente necesario para comunicar los avances, los retos, las dificultades, y apoyarnos mutuamente. Con nuestra empresa Florex hemos participado en varios Biolíderes y ha sido un aprendizaje constante, siempre nos hemos llevado contactos y han surgido alianzas”, puntualizó.
Este espacio de intercambio le permitió a la UNA mostrar las investigaciones desarrolladas en esta área, por ejemplo en biomateriales. Ana Francis Carballo Arce, investigadora de la Escuela de Química, explicó que “están generando una red interna en la universidad. Tenemos al Departamento de Física y las escuelas de Ciencias Biológicas, Química y Medicina Veterinaria trabajando juntas para diseñar biomateriales”. Agregó que también desarrollan investigación en bioprospección de la biodiversidad, además de contar con un humedal modelo que trata las aguas utilizando plantas y la biota que se genera en sus raíces.
Científicos coincidieron en que el desarrollo de la economía circular va de la mano a la investigación biotecnológica. Foto: Joaquín Salazar
Para el Estado, promover la innovación es un eje transversal en la búsqueda del desarrollo. Por esta razón, el Ministerio de Ciencia y Tecnología (MICIT) es parte del clúster y organizador del evento Biolíderes. Federico Torres Carballo, director de Innovación, manifestó que “tenemos interés en que el área se desarrolle para que podamos intercambiar conocimientos, crear nuevas ideas y generar nuevos proyectos en el ámbito de bioeconomía. La Estrategia Nacional de Economía se lanzó en el 2020 y en estos tres años evidentemente hay empresas que han estado haciendo muchas cosas de gran impacto a nivel nacional e internacional, por lo que queremos mostrar esos resultados” explicó Torres.
Economía y ciencia
Los científicos invitados al programa de televisión UNA Mirada coincidieron en que el desarrollo de la economía circular va de la mano con la investigación biotecnológica. En Costa Rica, muchas de las investigaciones apuntan a la reutilización de los residuos de la industria agrícola, por ejemplo. Su aplicación industrial permitirá la creación de empresas en la periferia del país. “Los desechos agroindustriales están generados en zonas rurales, entonces uno podría estar visualizando a futuro la instalación de empresas de base tecnológica en estas zonas donde el impacto sería mayor, porque los índices de desarrollo son menores”, explicó Carballo.
De ahí la importancia de la sinergia entre la academia, la industria y las necesidades de las regiones, para así dar respuestas innovadoras a los grandes problemas ambientales, sociales y económicos con perspectiva de territorio. “Es muy importante mantener el vínculo porque nosotros mismos damos pie a generar la industria que puede contratar los perfiles que estamos generando dentro de la universidad”, agregó la académica.
La formación de científicos con espíritu emprendedor también es parte del nuevo perfil de salida, ya que el nivel competitivo y de formación de los estudiantes potencia la creación de nuevas empresas de base tecnológica “que aportan realmente al desarrollo de un país”, aportó Carballo.
Paralelamente, el sector busca la inversión o el establecimiento de empresas tecnológicas extranjeras en Costa Rica, dado el alto nivel de capacitación de los científicos e ingenieros nacionales. Así lo señaló Charles Sánchez, director ejecutivo de Fundación Inciensa, quienes adicionalmente tienen un programa de formación de profesionales para complementar el hábitat o el desarrollo de operaciones empresariales de investigación en el país. “Nosotros nos hemos unido a otros actores nacionales con el propósito de tener un brazo más fuerte para poder mostrarnos como un sitio para el desarrollo de investigación” señaló Sánchez.
Christian Marín Muller, virólogo y fundador de Speratum, coincide en la fortaleza del talento costarricense. “Cuando fundé Speratum en el 2014 en Costa Rica, decidimos hacerlo acá porque sabíamos que hay un talento realmente fantástico, nuestras universidades tienen programas muy fuertes que preparan muy bien a los estudiantes. Tenemos profesionales altamente capacitados que pueden competir con cualquier país del mundo, en conocimiento y en ideas creativas”. Es por esta razón que los especialistas concuerdan que Costa Rica tiene un gran potencial para desarrollar soluciones innovadoras e implementar economía circular para resolver los problemas en diferentes ámbitos de la biotecnología, ya que ofrece una gama multicolor de áreas de aplicación e investigación. “Hay muchísimo potencial, realmente se espera que para el 2050 el 100% de todos los materiales agro residuales del mundo sean aprovechados”, indicó la empresaria Patricia Trinler, quien además hizo un llamado a los grupos de financiamiento para apoyen el crecimiento del sector junto a la academia y las empresas privadas.
La biotecnología y sus aplicaciones:
RI-UNA comparte experiencias en políticas públicas para el desarrollo
Foto: Antonio Arroyo
Antonio Arroyo Álvarez / CAMPUS
antonio.arroyo.alvarez@una.cr
Con el objetivo de fomentar el intercambio y crecimiento profesional en materia de políticas públicas de la región, la Escuela de Relaciones Internacionales (RI-UNA) realizó el evento académico: Reimaginando América Central: Políticas Públicas para el Desarrollo Sostenible, con la participación de la KDI School of Public Policy and Management de Corea de Sur y la Escuela Regional de Políticas Públicas para el Desarrollo de la Universidad de San Carlos de Guatemala (ERPPD).
La actividad, llevada a cabo durante los días 5, 6 y 7 de junio en el Edificio de Emprendimiento, Campus Benjamín Núñez, fue financiada por el gobierno de Corea del Sur y se da bajo el programa de Desarrollo de Capacidades para la ERPPD 2023.
“Este evento cumplió con repensar y examinar sobre las políticas públicas que pueden incidir en el desarrollo de la región y enfrentar los retos en el contexto contemporáneo. Además, fortaleció los procesos de internacionalización que viene liderando la Universidad Nacional.”, indicó Marco Méndez, director de la escuela RI-UNA.
La delegación coreana estuvo representada por Jinsoo Lee, decano asociado para la Investigación del Desarrollo y Cooperación Internacional; Haiyoung Yun, decana adjunta de Relaciones Externas, y Taeyoung Kim, investigadora asociada, miembros de la KDI School, quienes durante las conferencias compartieron experiencias del desarrollo económico y los sistemas de política pública en Corea del Sur.
Para la decana Yun, fue de gran importancia estar en el país para fortalecer los conocimientos en el desarrollo de las políticas públicas y experiencias con profesionales y estudiantes de la UNA y la Universidad de San Carlos de Guatemala.
Por otro parte, la directora de la ERPPD de la Universidad de San Carlos, Ana Silvia Díaz, destacó la importancia de estrechar los vínculos colaborativos en la conferencia Cooperación internacional entre Corea del Sur y la región de América Central.
Durante la actividad también participaron funcionarios de Mideplan, quienes compartieron los procesos de cómo esta entidad asesora en materia de políticas públicas para una adecuada implementación y la gestión de la cooperación internacional en Costa Rica.
Por parte de la UNA, participaron los académicos Duayner Salas, con la presentación Mejores prácticas comerciales de Costa Rica, y Luis Diego Segura, con la exposición Centroamérica en el escenario internacional y el caso de Costa Rica.
En este marco, la escuela RI-UNA sostuvo una reunión con los representantes de la KDI School para explorar posibilidades de un acuerdo para la colaboración académica, intercambios en programas de posgrado o conferencias, el desarrollo en Costa Rica de actividades académicas y la oportunidad de becas en la Escuela de Políticas Públicas y Gestión KDI.
Pie de foto: La actividad permitió fortalecer las capacidades de profesionales académicos y estudiantes en políticas públicas.
¿Justicia culpable? UNA analizó femicidios en el país
Foto: Luis Benavides
Luis Benavides Montero para CAMPUS
campus@una.cr
El Instituto de Estudios de la Mujer (IEM-UNA) y la Municipalidad de Heredia organizaron el conversatorio ¿Falló la justicia? Análisis de casos de femicidios en Costa Rica, que se desarrolló el pasado 15 de junio en el auditorio de Filosofía y Letras UNA para analizar la situación de las familias en lo relativo a la justicia de las víctimas y los protocolos que pueden o no favorecer la impunidad en esta materia.
Durante el conversatorio se trataron los temas del acceso a la justicia por parte de los familiares, fallos y omisiones de la justicia e incumplimiento de los protocolos que favorecen la impunidad, y los retos para garantizar el acceso a la justicia.
El espacio de análisis y reflexión contó con la participación de Larissa Arroyo, académica del IEM y especialistas en derechos humanos: Ana Hidalgo, de la Red Feminista contra la Violencia hacia las Mujeres; Xavier Sánchez, representante de familiares víctimas de femicidio, y Oscar Morera, del grupo de familias Sobreviviendo al Femicidio.
“Se debe priorizar la violencia a las mujeres como el principal problema de seguridad ciudadana, ahora que estamos hablando del tema en el ámbito nacional. Las autoridades deben entender que para las mujeres los problemas de seguridad tienen que ver con este tipo de situaciones de violencia, como la violencia sexual que es donde sufrimos más riesgos a la integridad física y la integridad sexual”, indicó Hidalgo.
Por otra parte, tras la falta de presupuesto en el país para atender la violencia de género, Oscar Morera subrayó en que “los ciudadanos deberíamos exigir a nuestros gobernantes, a los tres poderes de la República, poner el foco donde tienen que estar y comprometerse a que si son tres mil o diez mil millones de colones los van a asignar”.
Según el Observatorio de Violencia de Género contra las Mujeres y Acceso a la Justicia del Poder Judicial, se define femicidio como la más grave de las violencias de género, en la cual una mujer es asesinada, por su condición, usualmente a manos de su pareja actual o pasada, o de otro hombre con quien no tiene o tuvo una relación amorosa. No es un homicidio común, sino producto normalmente de una violencia escalonada y una relación desigual entre la mujer y el hombre femicida.
Homenaje a las víctimas de femicidio
En el marco del conversatorio, se presentó la exposición Hilando memoria, tejiendo justicia, muestra recopilatoria de 20 años de casos de femicidio, donde se mostraron 56 retratos de víctimas de femicidio, con una breve exposición de ellas y su caso.
Los retratos de los casos expuestos datan del año 2003 al 2023 y fueron expuestos en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNA, donde la comunidad universitaria y visitantes tuvieron la oportunidad de dejar un mensaje relacionado con el tema.
Pie de foto: En el marco de la actividad realizo un homenaje a las víctimas de femicidio en el país
Salud financiera
de los ticos mejora
Especialistas analizaron la implementación de la Ley de Usura a tres años de su aprobación.
La legislación aprobada permitió disminución en las tasas de interés, tanto en créditos personales como en tarjetas de crédito.
Roberta Hernández/CAMPUS
rherna@una.cr
En junio de 2020, se publicó en el diario oficial La Gaceta la Ley N°9859 mediante la cual se introdujeron las reformas en materia de usura crediticia a la Ley N°7472; a tres años de su implementación, la llamada Ley de Usura permitió que la salud financiera de la ciudadanía mejorara, aunque persisten importantes pendientes en esta materia, según la opinión de los especialistas que analizaron el tema en el programa de televisión de la Universidad Nacional UNA Mirada.
El objetivo principal de esta ley es proteger a los consumidores y promover la estabilidad y la equidad en el sistema financiero, de modo que contempla la regulación de tasas máximas.
“Entonces la Ley de Usura viene a poner topes a esas tasas de interés en esos segmentos que son diferenciados; además, viene a darle responsabilidades a SUGEF, al Ministerio Economía y al Banco Central en el proceso de regulaciones prudenciales, para que el mercado financiero se vuelva mucho más competitivo y más dinámico”, explicó Leiner Vargas, investigador del Centro Internacional de Política Económica para el Desarrollo Sostenible de la Universidad Nacional (Cinpe-UNA) y quien estuvo muy de cerca al proceso de creación de la ley.
La legislación aprobada permitió una disminución en las tasas de interés, tanto en créditos personales como en tarjetas de crédito. Vargas agregó que las tasas de interés en Costa Rica disminuyeron un promedio de alrededor de diez puntos porcentuales desde la implementación de la Ley de Usura y, en el caso de los créditos personales, también hay una reducción en las tasas de interés, aunque en menor medida que en las tarjetas de crédito.
Welmer Ramos, economista y uno de los diputados que promovió la ley en el Congreso de la República en su momento, enumeró una serie de datos que justificaban su aprobación, pues en Costa Rica había tasas de hasta el 210 por ciento anual. “Cuando arrancamos con esto, en el 2014, había cuatro millones de colones prestados a tasas que superaban el 62%, entonces el sobrepago que hacían los costarricenses era muy, muy alto” puntualizó.
“Creo que los costarricenses han visto un gran beneficio porque a pesar de que en este momento las tasas de interés no están donde nosotros queríamos, logramos establecer un acuerdo, una fórmula y procedimientos para los microcréditos que utilizan las financieras que venden electrodomésticos, las casas de empeño, y logramos también que los costos estuvieran dentro de las tasas,” admitió con positivismo David Gurzong, exdiputado y promotor del proyecto en la Asamblea Legislativa.
Vargas agregó que “desde el punto de vista financiero, la ley ha sido un aporte muy importante a la competencia en el mercado y a la innovación”, pues las entidades financieras buscan diferenciarse de sus competidores ofreciendo una amplia gama de productos y servicios, además de que compiten en términos de calidad del servicio al cliente, buscando ofrecer una experiencia más satisfactoria y personalizada.
Mejoras
En el marco del aniversario de la implementación de la Ley de Usura, el Cinpe-UNA realizó un estudio que demostró que la disminución en las tasas de interés en los créditos personales, mejoró la accesibilidad al crédito para los consumidores y estimuló la demanda de préstamos. Además, obligó a las entidades financieras a ser transparentes en cuanto a las tasas de interés y otros cargos asociados, lo que ha permitido a los consumidores tomar decisiones informadas.
La investigación indica que, “al contar con información clara y detallada sobre las condiciones de los créditos, los consumidores pueden comparar diferentes opciones y elegir aquella que mejor se adapte a sus necesidades y capacidad de pago. La transparencia en la divulgación de las tasas de interés y otros cargos permite a los consumidores comparar fácilmente las ofertas de diferentes instituciones financieras”.
A tres años de la implementación de esta ley, la Oficina del Consumidor Financiero (OCF) considera que los avances son positivos aunque falta mucho por resolver en torno a las problemáticas del consumidor. Danilo Montero, director de esa entidad, indicó que los retos son mayores desde que Costa Rica está inserta en la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), porque la tramitología encarece los créditos de pequeños y microempresarios por lo que la tasa máxima no es suficiente.
Los especialistas coincidieron en la necesidad que tiene el país de disponer datos actualizados y criticaron a la Superintendencia General de Entidades Financieras (SUGEF) y al Banco Central por no tener información de acceso público que le permita al consumidor financiero tomar decisiones, comparar tasas y oferentes de tarjetas o créditos.
“El Ministerio de Economía, Industria y Comercio y la SUGEF no han cumplido todavía su rol de supervisar efectivamente el cobro de las tasas por debajo del límite de la usura, y sabemos que no se ha planteado ni una sola denuncia penal contra los entes financieros que están cobrando por encima de lo que es hoy un delito penal” , señaló Daniel Vartanian, economista y exfuncionario del MEIC.
Vargas agregó que actualmente hay vacíos en cuanto a la educación financiera y la implementación de una Política Nacional de Educación Financiera que permita a los consumidores tomar decisiones saludables a la hora de acceder a un crédito o aceptar una tarjeta. El MEIC es la entidad responsable de poner esta política en marcha, pero no se ven avances.
Inteligencia artificial impacta Costa Rica
Foto Shutterstock
Luis Benavides Montero para CAMPUS
campus@una.cr
La Inteligencia Artificial (IA) ha sido parte de los avances tecnológicos experimentados en el país en los últimos años, con importantes impactos en lo académico, lo laboral y en la cotidianidad de la ciudadanía.
El tema fue abordado por la Escuela de Administración (EDA) de la Universidad Nacional (UNA) en el conversatorio Academia y laboralidad en la era de la IA, que tuvo lugar el pasado mes en modalidad virtual con expertos, docentes y estudiantes quienes compartieron sus conocimientos sobre el tema.
En la actividad participaron la directora de la EDA Dunnia Marín, el académico de esta unidad Fernando Montero, como moderador; y los expositores Juan Sánchez, especialista en ciencias empresariales y derecho corporativo, y Mohamed Ávila, consultor financiero y emprendedor serial.
Según Dunnia Marín, desde la EDA reconocen la importancia de la IA, su impacto y los retos para la vida académica, laboral y diaria. “La inteligencia artificial y sus aplicaciones se están volviendo cada vez más presentes y predominantes. Estos avances implican riesgos y retos, y sin duda abordan la educación”.
Por su parte, Juan Sánchez explicó que las tres principales industrias que encabezan la inversión en IA corresponden a un 20% de los servicios bancarios, un 18% de los servicios de salud y 17% de ventas. Aclaró que “no es que la Inteligencia (artificial) nos vaya a reemplazar, el tema es que nosotros nos adecuemos y podamos utilizarla. Lo mismo pasó en la revolución industrial y la revolución de computadoras; hoy estamos ante una nueva revolución, es solo un tema de adecuarse para utilizarla y aprovecharla”.
Según Mohamed Ávila, la IA produjo su “primera oleada” en 2010, cuando llegó a formar parte de internet y hasta el día de hoy, donde la “quinta oleada” es de conciencia con la aparición del chat GPT. Durante este lapso, se han visto involucrados el comercio electrónico, juegos y publicidad, los negocios, servicios públicos, bancos, educación y servicios médicos, así como los hogares y ciudades inteligentes, esto incluye la robótica, coches autónomos, agricultura y fabricación.
Para los expositores, los principales riesgos de la IA son la creación de “verdades falsas”, manipulación de masas, incremento en el desempleo y, por ende, de pobreza, discriminación a un sector de la población y que las personas se vuelvan “tecno dependientes”, por el uso excesivo de los recursos la tecnológicos.
También abordaron las oportunidades que se pueden tener, como realizar diagnósticos más tempranos y precisos, tareas automatizadas, la seguridad mediante modelos de prevención de delincuencia en el mundo físico y los avances científicos que podrán ser potenciados de manera exponencial.
Conversatorio permitió compartir sobre los retos que enfrenta nuestro país en esta era digital
Medpob y Cripas destacan por su utilidad
Foto Johnny Núñez, UNA
Johnny Núñez Z. / CAMPUS
jnunez@una.cr
Dentro de los cinco grandes programas con los que cuenta la Escuela de Medicina Veterinaria (EMV) de la Universidad Nacional (UNA), con 20 años de trayectoria sobresale como referente nacional e internacional el aporte del programa Medicina Poblacional (Medpob), que incluye al Centro Regional de Informática para la Producción Animal Sostenible (Cripas), por el uso y aplicación del software Vampp-Bovino en el sector lechero.
Estas áreas fueron seleccionadas en el marco de una estrategia para elaborar un diagnóstico que permita conocer el impacto y alcance de la investigación veterinaria en diversos sectores, iniciativa que promueve la Vicerrectoría de Investigación de la UNA.
El programa Integrado de Medicina Poblacional (Medpob) nace por la necesidad de ofrecer al sector productivo pecuario nacional una opción de realizar actividades de investigación y extensión con pertinencia y calidad y, al mismo tiempo, de enriquecer la docencia en la EMV y el Pcvet.
Juan José Romero, académico de Medpob y Cripas, explicó que dentro del ámbito universitario este es uno de los que más investigación produce durante el tiempo, en especial la relación cantidad de investigación con los tiempos dedicados por parte del personal académico que lo integra.
Detalló los ámbitos de acción que componen el programa: salud animal, salud de poblaciones humanas, zoonosis y enfermedades transmisibles, producción y reproducción animal y una parte vinculada con salud de animales de vida silvestre. “Desde nuestra fundación, hemos trabajado con otro programa líder Consultoría Regional en Informática para la Producción Animal Sostenible, conocido como Cripas, y también con el posgrado en ciencias veterinarias tropicales Pcvet”.
Publicaciones de impacto
Romero subrayó que tanto en Medpob como en Cripas se ofrecen datos y acompañamiento, por ejemplo en el laboratorio de zoonosis y medicina poblacional, que coordina la doctora Gaby Dolz, los estudiantes de la maestría en enfermedades tropicales realizan investigación, acompañados desde el área de epidemiología y estadísticas a cargo de Bernado Vargas.
“Una buena cantidad de los estudiantes en maestrías académicas los acompañamos en la publicación de los resultados de sus investigaciones de tesis. De ahí saldrá uno o tres artículos de primera línea con investigación de alto impacto, que debería repercutir en la toma de decisiones y políticas públicas”, explicó Romero.
En tanto, el programa Cripas busca mejorar la generación de información para permitir a productores y sus asesores una ágil y adecuada toma de decisiones en el manejo de la salud y la producción, resultando en un uso más eficiente y sostenido de los recursos y tecnologías disponibles.
Vampp-Bovino desarrollará dentro de poco una App para celulares que hará más atractivo el software y ampliará su cobertura.
Investigación UNA de la mano con desarrollo del país
Las universidades públicas generan conocimiento y promueven el avance científico y tecnológico para el desarrollo de la sociedad. A través de la investigación, se exploran nuevas ideas y se descubren soluciones innovadoras a problemas complejos que generan impacto en áreas como la producción agrícola y ganadera, sismología y vulcanológica, educación, medicina y otras.
Laura Ortiz C. /CAMPUS
lortiz@una.cr
Por casi cuatro décadas, la Universidad Nacional (UNA) y el Instituto Nacional de Transferencia y Tecnología Agropecuaria (INTA) han trabajado en el mejoramiento de plantas y animales, prácticas de campo y post cosecha, con las que los agricultores han innovaso en beneficio del sector agropecuario del país.
“Hemos contribuido con las capacidades de ambas instituciones para el desarrollo del sistema agropecuario nacional. Colaboramos con nuestros laboratorios y estaciones experimentales en un trabajo conjunto para aportar a la investigación del sector”, dijo Nevio Bonilla, director de INTA.
Un informe de la Vicerrectoría de Investigación evidencia que en el 2022, la UNA desarrolló 426 programas, proyectos y actividades de investigación en distintos temas, de los cuales el 64,6% tuvo influencia en regiones geográficas diferentes a la central del país e, incluso, algunos de los resultados trascienden las fronteras. Destaca, por ejemplo, por sus aportes en sismología y vulcanología, monitoreo de la calidad del aire, información relacionada con las corrientes marinas y la marea roja, y por la aplicación de encuestas de opinión sobre distintos temas de interés nacional y la vida silvestre, entre otros.
“El Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac) y la UNA tienen trabajo colaborativo importante en el monitoreo y manejo de emergencias volcánicas, en este caso con el Laboratorio de Química de la Atmósfera y el Ovsicori. Asimismo, se trabaja con el Instituto Internacional de Conservación y Manejo de Vida Silvestre (Icomvis) para estudiar las relaciones de la vida silvestre con el ser humano. Ellos nos dan el conocimiento técnico y la información que el Sinac requiere y con la cual se fundamenta la atención de un área silvestre protegida, en cuanto a la operación turística y el manejo de la biodiversidad biológica”, destacó Redy Conejo, coordinador de Áreas Silvestre Protegidas del Sinac.
Además, la UNA desarrolla investigaciones relacionadas con gobernanza climática, salud de los ecosistemas y de las especies animales que habitan los parques y reservas nacionales, contaminantes persistentes, desarrollo de prácticas agrícolas eco amigables, manejo y restauración de bosques y manglares, gestión de riesgo ante inundaciones y otros desastres naturales y conservación de la biodiversidad, para citar algunos. A estas se suman estudios sobre erosión costera, corrientes de resaca y seguridad en las playas y ordenamiento territorial. Sus resultados han sido insumo para la toma de decisiones en el ámbito del gobierno central, de gobiernos de las localidades urbanas y rurales y del sector turístico costarricense.
Aliados
La contribución a los sectores agropecuario y forestal se manifiesta en procesos asociados con el mejoramiento genético vegetal y animal, el aumento de la productividad en granjas apícolas y acuícolas, fincas agrícolas y forestales y en la producción de rumiantes menores y vacunos, tanto como resultado de esa mejora genética como de investigaciones en la producción misma y en el ámbito sanitario y reproductivo, que alcanzan animales silvestres y domésticos.
Particular importancia revisten las investigaciones en diagnóstico y prevalencia de enfermedades zoonóticas que han merecido premios y reconocimientos en ámbito nacional e internacional a las personas funcionarias de la institución. Recientemente, se incursiona en la medicina regenerativa traslacional como terapia alternativa para tratar enfermedades músculo esqueléticas o articulares que causan dolor, disfunción y que actualmente no tienen cura con el fin de mejorar la calidad de vida de los animales y del ser humano.
También destacan los aportes de la investigación de la UNA al tratamiento de residuos agroindustriales y marinos para la producción de materiales biodegradables, biocombustibles, la extracción de sustancias activas para su aprovechamiento como suplementos nutricionales y fitofármacos, el desarrollo de nuevos medicamentos para aplicaciones antioxidantes y anticancerígenas, entre otras, o bien para mejorar la biodisponibilidad.
Por otra parte, la investigación de la UNA ha llegado a las aulas de los centros educativos con sus aportes a la educación y rescate de las lenguas indígenas, la etno pedagogía, la gestión educativa para la promoción de entornos inclusivos y la gestión curricular en general, así como las distintas manifestaciones de las artes han llegado a diferentes grupos sociales con fines curativos, recreativos y culturales.
Pie de foto: La investigación en las universidades públicas impulsa la transferencia de conocimiento y tecnología hacia el sector productivo y la sociedad en general. Foto Laura Ortiz
Funcionalidad es clave en la vejez
Foto Shutterstock
Johnny Núñez Z./CAMPUS
jnunez@una.cr
Investigaciones realizadas por la Escuela de Ciencias del Movimiento Humano y Calidad de Vida (Ciemhcavi) de la Universidad Nacional (UNA) determinaron que la funcionalidad en el adulto mayor es indispensable para garantizar una mejor calidad de vida en la vejez, pues un adulto mayor dedicado más de lleno a sus actividades diarias se vuelve una persona más activa.
Luis Solano, coordinador del Programa Movimiento para la Vida (Movi), explicó que la funcionalidad en los adultos mayores consiste en que puedan realizar sus actividades básicas e instrumentales de la vida diaria, de forma independiente. “Es muy diferente un adulto mayor que va al supermercado a pie a traer sus bolsas en la mano, a otro que solo puede ir a ese sitio, pero que su condición física no le permite hacer un esfuerzo mayor”, comentó Solano.
Si usted convive con personas adultas mayores y nota que al realizar sus actividades físicas se cansan muy rápido, les cuesta vestirse, pierden el equilibrio al caminar, dan pasos muy cortos, es posible que esté entrando en un proceso de disfuncionalidad, cuyo riesgo radica en que esa persona se vuelva totalmente dependiente. De ahí que es fundamental realizar actividad física, pues de no ser así podría afectar el desempeño de su vida diaria.
Actividad física
Solano agregó que para devolver la funcionalidad al adulto mayor se deben considerar las variables físicas que involucren la fuerza, resistencia cardiovascular y la flexibilidad. “Este tipo de elementos permitirá al adulto mayor tener los requerimientos básicos en su desempeño diario. En su hogar puede reutilizar botellas con agua de 600 ml, litro y litro y medio, para realizar flexiones de codo e iniciar con pocas repeticiones hasta sentir un cansancio moderado, descansa un minuto y lo repite. También utilizar bolas de hule para realizar movimientos muy suaves con los pies”, mencionó el académico.
El especialista recalcó que los estilos de vida actuales están llevando cada vez más a la persona a ser sedentaria y, por ende, a descuidar el aspecto de la funcionalidad. La Organización Mundial de la Salud (OMS) estipula que lo mínimo, para que una persona se mantenga funcional a lo largo de su vida, son 30 minutos de actividad física acumulada diariamente o, lo que es lo mismo, fragmentar esa media hora en tres turnos de 10 minutos cada uno o dos de 15 minutos, a distintas horas del día, para mantener los niveles de salud adecuados.
Si la persona adulta mayor desea ser orientada, el programa Movi le enseña a descubrir esas actividades diarias que contribuirán a mejorar su calidad de vida. Durante varios días a la semana, grupos de personas adultas mayores experimentan los beneficios de la práctica de la actividad física, el deporte y la recreación.
La falta de actividad física provocará que la persona se vuelva disfuncional.
Estudiantes de Liberia crean proyectos de accesibilidad para personas ciegas
Foto Cristian Chaves
Cristian Chaves Jaén para CAMPUS
cristian.chaves.jaen@una.cr
Un grupo de estudiantes de IV nivel de la carrera de Ingeniería en sistemas del Campus Liberia de la Universidad Nacional (UNA) diseñó e implementó una serie de proyectos que brindan mayor acceso a la información y facilidad de orientación para las personas con discapacidad visual, a través del curso de Métodos de Investigación Científica en Informática.
Uno de los proyectos se centra en el diseño de placas con resumen informativo, en braille, de los carteles sobre las diferentes especies de aves que se observan en el campus. Así las personas ciegas acceden a la información sobre dichas aves, con descripciones detalladas. “Esta propuesta promueve la inclusión y el interés por la biodiversidad, y brinda a todos los visitantes la oportunidad de disfrutar y aprender sobre la rica fauna del campus”, indicó Anthony Eras, estudiante de IV nivel e integrante del proyecto.
Otro de los proyectos consiste en el diseño e impresión, con tecnología 3D, de los rótulos de las aulas con el sistema braille. Este enfoque innovador permite rotular en relieve el número de identificación de las aulas, lo cual facilita la orientación de las personas ciegas en el campus. Anthony Rugama, estudiante de IV nivel e integrante de este proyecto, resaltó que “la combinación de la impresión 3D y el sistema braille demuestra cómo la tecnología puede desempeñar un papel fundamental en la creación de entornos accesibles”.
Por último, los estudiantes diseñaron un modelo de maqueta en 3D del Campus Liberia específicamente para personas ciegas. Con el proyecto se creó una representación táctil y tridimensional del campus, incluyendo edificios, áreas verdes y puntos de referencia importantes. “La maqueta ofrece a las personas ciegas la posibilidad de explorar y familiarizarse con la distribución del campus, promoviendo así su autonomía y comprensión del entorno”, aseguró Carlos López, también estudiante de IV nivel.
En su visita al Campus Liberia, el pasado mes de junio, Marianela Rojas Garbanzo, rectora adjunta de la UNA, destacó cómo, desde la interdisciplinaridad, los estudiantes “pueden involucrarse con proyectos desde este orden social que siguen siendo una oportunidad de potenciar y dar una mejor calidad de vida a muchas personas y, sobre todo, ver la motivación de estos muchachos es realmente gratificante. La satisfacción en sus miradas de haber logrado el producto y que tiene un beneficio para muchas personas en nuestro país, refleja el sentido que tiene la educación pública.”
Rojas agregó que el éxito de estos proyectos se ha convertido en un modelo a seguir para futuras iniciativas en el ámbito de la accesibilidad en el campus y más allá. Se espera que el impacto positivo de estas acciones inspire a otros estudiantes y profesionales a trabajar en proyectos similares que mejoren la calidad de vida y la igualdad de oportunidades a más personas en la promoción de la accesibilidad.
Daniel López y Justin Salazar, estudiantes de IV nivel de Ingeniería en Sistemas; Wagner Castro, decano de la Sede Regional Chorotega y Marianela Rojas, rectora adjunta de la UNA, mostraron lo que la colaboración interdisciplinaria y el uso de la tecnología puede lograr en favor de la inclusión y la equitatividad.
Fotografías de izquierda a derecha: Sebastián Ferrucho, Jesús Mejía y Sofía Madrigal, estudiantes seleccionados para el Salón Nacional de las Artes 2023 en el Museo de Arte Costarricense. Fotografías cortesía estudiantes. Aurora Ferraboschi, estudiante seleccionada para la exhibición itinerante del 10° Certamen Internacional de Ilustración Científica 2023, España. Fotografía cortesía del Curso Optativo de la EACV.
Artes visuales con proyección estudiantil
Estudiantes de la Escuela de Arte y Comunicación Visual de la Universidad Nacional (EACV-UNA) fueron seleccionados para la participación del Salón Nacional de Artes Visuales del Museo de Arte Costarricense (MAC) 2023
Johnny Núñez Z./CAMPUS
jnunez@una.cr
De un total de 188 postulaciones, un jurado especializado seleccionó 48 propuestas para ser parte de la exposición colectiva del Salón Nacional de Artes Visuales del Museo de Arte Costarricense (MAC); tres de los artistas seleccionados cursan estudios en la Escuela de Arte y Comunicación Visual de la Universidad Nacional (EACV-UNA).
Sebastián Ferrucho Blandón del área de grabado, Jesús Mejía Fonseca y Sofía Madrigal Blanco, del área de pintura del nivel de licenciatura, afirman que esta es una valiosa oportunidad profesional para mostrar la importancia de sus procesos e investigaciones técnicas, así como el abordaje temático en torno a las exploraciones particulares mediante las prácticas artísticas actuales.
Ferrucho presenta cuatro obras, cuya temática aborda la relación de las personas con las redes sociales y su adicción a ellas; las obras se realizan mediante aguatinta, aguafuerte y cofrado.
“Participar es una satisfacción y motivación muy grande para seguir explorando la técnica del grabado, ya que el país posee una fuerte tradición en dicha área del lenguaje gráfico”, dijo Ferrucho.
Mejía presenta la obra Bitácora del sueño eterno, un óleo sobre lienzo cuya propuesta gira a partir de la vivencia personal como cuidador de su abuela, quien sufre de Alzheimer.
“El haber sido seleccionado por segundo año en el salón nacional del MAC es un incentivo para seguir compartiendo y desarrollando mi propuesta artística, que por medio de la legitimación de un espacio como este, donde se comparte con artistas emergentes y consagrados, le brinda mucha satisfacción a uno como creador”, mencionó Mejía.
Por otra parte, Madrigal presentó cuatro pinturas, de ellas tres son técnicamente resueltas en óleo sobre lienzo y la cuarta en una técnica mixta sobre madera, bajo el título La autopercepción desde el ciberespacio, obra que aborda aquellas manifestaciones sobre el aislamiento social debido a la estadía permanente en la internet.
Para Madrigal participar en dicha exposición la motiva a seguir explorando diversas técnicas y procesos conceptuales del lenguaje visual; menciona sentirse muy emotiva también al poder compartir con otros artistas en dicho evento.
Las obras fueron seleccionadas por un jurado conformado por María José Chavarría, curadora del MAC; Rubén Jerez, académico de la Universidad de Costa y José Daniel Picado, curador jefe del Museo de Arte y Diseño Contemporáneo.
Esta es la cuarta edición del certamen, que tiene como objetivo plantear un espacio de valorización y visibilización de las prácticas artísticas actuales en el medio y tener una visión más global de la producción nacional en el campo de las artes visuales.
Proyección internacional
Aurora Ferraboschi, estudiante del énfasis de Diseño gráfico de la EACV-UNA, participó en el Certamen Internacional de la 10° Edición de Ilustraciencia, convocada por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y la Asociación Catalana de Comunicación Científica (ACCC).
Ferraboschi participó con una ilustración científica realizada a partir de la exploración y desarrollo en el Curso Optativo de Ilustración Científica por medio de Herramientas Digitales de Diseño Gráfico 2022, a cargo del académico Alexis Bustamante Rodríguez, mediante una muestra de la colección del Laboratorio de Entomología de la Escuela de Ciencias Biológicas (Leuna), facilitado por el académico Meyer Guevara.
La muestra que desarrolló la estudiante es un acercamiento de representación visual de una especie adulta de Corydalus, abordando en la ilustración las características de esas grandes dimensiones de fuertes mandíbulas de la especie del macho de Corydalus, orden megaloptera. Para esta 10° edición del certamen, Ferraboschi participó en la categoría de Ilustración Científica, mediante la técnica digital vectorial con el programa Illustrador.
De las más de 500 propuestas enviadas, la de Ferraboschi fue elegida para ser parte de las ilustraciones científicas para las futuras exhibiciones colectivas itinerantes. “La exploración y desarrollo de la ilustración científica por medio de técnicas digitales del diseño, articulada a una guía metodológica de ejecución, permitió alcanzar una aproximación visual de forma precisa y objetiva, cuya finalidad es representar la información para una mayor accesibilidad e interpretación del público a determinados hallazgos y estudios científicos, en este caso la información concreta de la especie Corydalus SP., cuya muestra fue facilitada por el Leuna”, detalló Bustamante.
La exposición colectiva itinerante inició su recorrido el 30 de junio del presente año, cuya sede es el Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid (MNCN-CSIC).
El Atahualpa se alista para temporada infantil
Laura Ortiz C. / CAMPUS
lortiz@una.cr
Tiliches, Chunches y Otros Cachivaches es la nueva puesta en escena del Proyecto Teatro UNA, con la que estudiantes de Arte Escénico y Danza pretenden conquistar la imaginación del público infantil desde el 25 y hasta el 27 de agosto, en el Teatro Atahualpa del Cioppo.
Tres singulares seres de Tilichelandia presentan a su amigo Mr. Grip, un viejo músico hecho de varios objetos. Este invitado especial compartirá un regalo para el público, pero para lograrlo, primero necesitará escuchar tres historias que lo ayudarán a creer en sí mismo. Randy Gutiérrez, estudiante de licenciatura de la Escuela de Arte Escénico, y Tayrona Castiglioni, estudiante de la Escuela de Danza, son los directores de esta historia dirigida a los más pequeños.
“Esta es una obra de teatro de objetos donde se combina el arte del pop-up y la manipulación de objetos para crear un mundo mágico y lleno de creatividad. El reto es crear una obra con temática infantil que hable de temas importantes como: creer en uno mismo, amarnos por lo que somos y saber que todos tenemos un propósito en nuestra vida. Este proceso de creación me ha brindado la oportunidad de poner a prueba mis habilidades artísticas, no solo como director sino también dando mis primeros pasos como investigador en las artes escénicas”, dijo Gutiérrez.
Para Castiglioni “fue bello generar desde la imaginación este mundo mágico. Siempre he pensado que crear desde el teatro de objetos es de los lugares más nobles del arte, en donde le das vida a otros seres y como artista pasas a un segundo plano. Ha sido un proceso en donde investigo y experimento desde otros lados del arte, con intérpretes que generan de sus mentes ideas mágicas”.
La obra contará, además, con las interpretaciones de Brenda Carrillo y Paulina Bernini, estudiantes de licenciatura de la EAE-UNA, y Bryan Guzmán, de la Escuela de Danza.
Teatro UNA es un proyecto Integrado de la EAE-UNA que, a través de sus componentes de docencia, investigación, y extensión, promueve un espacio profesional para los estudiantes de la carrera en Arte Escénico, quienes a través de procesos creativos de montaje y de investigación escénica, promueven y comparten el conocimiento generado desde el bachillerato y la licenciatura con la comunidad nacional e internacional.
La obra se presentará con el apoyo de Teatro en el Campus el 25 de agosto, a las 4 p.m., sábado 26 y domingo 27, a las 11 a.m., en el Teatro Atahualpa del Cioppo del campus Omar Dengo, en Heredia, y la entrada es gratuita.
Para más información visite en Facebook: Teatro UNA o en Instagram: teatro.una
Pie de foto: Paula Bernini, Brenda Carrillo y Bryan Guzmán serán los intérpretes en Tiliches, Chunches y Otros Cachivaches.
Encuentro intergeneracional promueve lectura en niñez
Antonio Arroyo Álvarez / CAMPUS
antonio.arroyo.alvarez@una.cr
Crear lazos entre las generaciones de las personas adultas mayores y la niñez, forma parte del trabajo de extensión que realiza el Centro de Estudios Generales (CEG-UNA) con el Taller Literario del Proyecto Encuentros Literarios UNA, adscrito al Programa de Atención Integral de la Persona Adulta Mayor (PAIPAM).
El pasado 6 de junio, se llevó a cabo el Encuentro Intergeneracional y la presentación de cuentacuentos en el Colegio María Auxiliadora, Heredia, dirigido a los niños y niñas de tercer grado y a cargo de las adultas mayores Vilma Masis y Clara María Aguilar.
“Estos encuentros literarios e intergeneracionales se refieren a la importancia, el gusto, aprecio y disfrute de la literatura infantil desde la infancia, en este caso desde el estudio de Los cuentos de mi Tía Panchita de Carmen Lyra. Además, la actividad permite crear lazos entre las generaciones para eliminar o, al menos, minimizar mitos y estereotipos acerca de la vejez, el envejecimiento, la juventud y la niñez”, indicó María Sancho, académica del CEG-UNA.
Foto María Sancho, académica CEG
Para la cuentacuentos Masis, el papel del CEG-UNA es de suma importancia pues, además de abrir una línea de conocimientos, recreación y sensibilización entre ambas generaciones, permite que la niñez y el personal de los centros educativos comprendan el valor de la participación de las personas mayores.
“Este tipo de actividades estimula la imaginación de los niños creando su propio pensamiento, también aprenden que hay muchas formas de comunicación utilizando gestos corporales y expresiones faciales, que les permite interiorizar y entender a quienes les rodean”, señaló la cuentacuentos Aguilar, quien destacó que “la proyección social del CEG entre diversos grupos sociales, no académicos, son variables que le dan pertinencia social a la universidad pública”.
Ambas relatoras coincidieron en que la idea es que niñas y niños puedan divertirse, conocer más de autoras y autores de obras literarias infantiles, y poner en práctica un ejercicio de concentración que irán desarrollando para estudios del futuro.
La académica Sancho concluyó que, “el Taller Literario del Proyecto Encuentros Literarios UNA, adscrito al PAIPAM del CEG, juega un importante papel de vinculación mediante el trabajo de extensión de la universidad hacia la comunidad, en este caso, a través de la organización de encuentros literarios e intergeneracionales entre población infantil y personas adultas mayores.”
Pie de foto: Los encuentros intergeneracionales permiten reforzar lazos entre los adultos mayores y niños y niñas.
Un homenaje a la mujer afrodescendiente en Guanacaste
Obituarios de la Memoria no es solamente un acto necesario o una deuda; es una acción imprescindible para reconocer el valor de esas vidas que hoy se hacen públicas.
Roberta Hernández Q. / CAMPUS
rherna@una.cr
“Don Gregorio Castro, guarda volante mayor, la vendió al capitán comandante Francisco Javier Viales. La venta ocurrió el 7 de enero de 1780 en Nicoya. Manuela Pacheco tenía 25 años y en los registros históricos la describen como una mujer de color negro, la cual fue un regalo de bodas que recibió don Gregorio y luego vendida por 200 pesos. Pacheco sirvió en la casa del capitán Francisco Javier Viales, en donde tuvo una hija, María Faustina de los Ángeles. Ambas mujeres fueron heredadas por la hija del capitán Viales, Mauricia Viales, quien se casó más tarde con Manuel Briceño. Posteriormente, pasaron a dominio de Manuel José Briceño Viales, uno de los hijos de este matrimonio. Manuela Pacheco obtuvo su libertad hasta los 83 años, luego de trabajar de forma esclavizada durante 58 años en distintas casas de la familia Viales. En 1838, don José Manuel Briceño Viales cobró, ante la Junta de Indemnización, el costo de otorgarle la libertad”.
De esta manera Daniel Matul, académico de la Universidad Nacional (UNA), introduce la exposición denominada Obituarios de la Memoria, que forma parte del proyecto Recuperación y reconocimiento del patrimonio cultural afrodescendiente que poseen los cantones de Nicoya y Santa Cruz, como medio para promoción educativa de la convivencia intercultural, de la Sede Regional Chorotega de la UNA en Nicoya.
Matul explicó que la muestra rescata la biografía de 15 mujeres que son símbolo de la resistencia afrodescendiente en Guanacaste, quienes entre 1700 y 1800 (periodo en que se marca la abolición de la esclavitud) lucharon por su libertad. “Una de las más emblemáticas y quizás de las últimas mujeres que logró su libertad fue Manuela Pacheco, esclava en la familia Briceño Viales, que son los gestores de la Anexión del Partido de Nicoya”, aseveró Matul.
El académico manifestó que se encuentra bien documentado en la historia afro latinoamericana que Pacheco mantuvo a su familia unida, quienes también recibieron la libertad después de la abolición de la esclavitud.
Agregó que en la historia sus nombres no aparecen, tampoco sus apellidos; son mujeres a las que se les negó el reconocimiento del papel que jugaron en la construcción de lo que hoy es Guanacaste y Costa Rica. “Esta exposición ha querido ir en busca de sus huellas y recuperar su memoria, porque cada imagen es una pequeña historia que les permite su aparición de una manera cercana, por muy remoto que nos pueda parecer su pasado”, expresó Matul.
El académico subrayó que, si bien la historia de la sociedad suprimió sus relatos, su presencia y su huella, en la actualidad aparecen para señalar la contemporaneidad de su significado en la cocina, lenguaje, música y en la forma en que se enarbola el cabello. Es el retorno de todas ellas a ocupar el espacio del que se les borró.
Tras su huella
Matul llama la atención que en el imaginario costarricense la historia ha descrito que lo afro está sólo vinculado con el Caribe; cuando en Nicoya y Santa Cruz, desde finales del siglo XV, hay presencia de esta población, la cual desarrolló economía, danza, instrumentos musicales. “Por ejemplo, en la Isla Chira y Nandayure hay evidencia histórica de que Pedro de Alvarado tenía un astillero donde la población afro fabricaba barcos. La Península de Nicoya fue considerada un eje vital no solo para la conquista sino para el desarrollo económico, donde Nicoya estaba muy vinculada con el comercio internacional”, comentó Matul.
Recalcó que por eso son llamados obituarios, porque es indispensable en la historia afro guanacasteca reconocer que hay memoria de 15 mujeres de origen africano que dejaron su legado en la cocina, en la música y tradicional oral como en cantos y canciones populares.
Matul también conserva algunas de las expresiones culturales de la presencia afro en Guanacaste como lo son la carraca (quijada de burro) y el quijongo (instrumento de cuerda) que presentan detalles afro guanacastecos, sobre todo propios de aquellos esclavos que arribaron a esta región como personal de servidumbre y hasta entretenimiento de allá por el siglo XV.
Arriba: obra de Daniel Matul, es una acción imprescindible para reconocer el valor de la vida de 15 mujeres afrodescendientes que hoy les honra, se les dignifica y valora. Fotos Johnny Núñez.
A través de su libro de poesía, Noche sin Luna, la escritora originaria de Corralillo, Milagro Obando Matarrita, narra la historia de su familia afrodescendiente.
Obando empezó a escribir poemas sobre la herencia africana en la provincia hace 20 años y ha sido a través del estudio y reflexión de la historia que llegó a un auto reconocimiento como persona afrodescendiente.
Precisamente el poema A escondidas forma parte del primer poemario de la escritora titulado Noche sin luna.
Sandra León Coto
Reformas que dieron frutos
Foto Laura Ortiz
Laura Ortiz C. /CAMPUS
lortiz@una.cr
Ocho años han pasado desde que Sandra León Coto dejó la Rectoría que ocupó entre 2010 y 2015 en la Universidad Nacional. En el marco de la celebración del 50 aniversario de la institución, la comisión organizadora para tal fin convocó una serie de conversatorios con los exrectores para conocer los hechos más destacados de su gestión , así como su mirada crítica sobre el futuro de la universidad pública; el pasado 10 de junio le correspondió el turno a León Coto.
“Algo que me enseñó este periodo fue que la planificación debe ser de al menos cinco años y la prospectiva de 20 o más. Entre 2007 y 2015 pudimos dar continuidad y trabajar sobre los ejes de: Pertinencia y calidad del quehacer académico. Producción académica. Innovación y simplificación de la gestión universitaria. Universidad justa, sostenible y saludable”.
De acuerdo con León, para el 2008 se realizó un cambio hacia un modelo de admisión más inclusivo, con el objetivo de favorecer el acceso a los sectores menos favorecidos. “Entre 2007 y 2015 la matrícula creció un 27.6%. En el 2015 entregaron documentos 7430 personas y se matricularon 4052, de los cuales 79,3% provino de colegios nocturnos rurales y otras modalidades del sistema educativo público y tan solo un 21,7% provino de colegios privados”.
Sandra León también destacó la posibilidad que se tuvo de reformar el Estatuto Orgánico. “Teníamos 23 años de tener el mismo estatuto. Logramos el IV Congreso Universitario que fue multiparticipativo. Logramos redefinir y ampliar los artículos sobre principios, fines y a valores así como la autonomía universitaria; el fortalecimiento a la desconcentración en la sedes; la creación de las vicerrectorías; se le dio más potestades al Consaca y menos al Consejo Universitario, así como una mayor profundización a la rendición de cuentas”.
Reconoció que en su gestión se hicieron avances sustantivos en distintas áreas, pero que todavía era urgente asegurar la planificación del quehacer universitario con visión prospectiva, con especial atención al aseguramiento de la sostenibilidad financiera.
“Hubo un avance importante como institución, tenemos un nuevo contexto nacional e internacional donde tenemos la oportunidad de agrupar académicos, de escribir artículos y proyectos en áreas fuertes que son fenómenos globales, debemos fortalecer líneas de trabajo pertinentes y relevantes, adaptar nuestros planes de estudio y actividades académicas a nuevos contextos de necesidades sin resolver o emergentes”.
Francisco González, actual rector y quien fue el vicerrector académico en la gestión de León Coto, agradeció el trabajo que realizó no solo como rectora, sino también como académica de la Escuela de Química, directora y decana de su facultad. “Nos dejó aportes significativos que hoy son una luz para esta universidad. Luchó por un mayor presupuesto para las universidades y el respeto a nuestra autonomía universitaria, sin dejar de lado que el asocio del gobierno con las universidades públicas es fundamental para el desarrollo del país”.
Sandra León Coto fue rectora de la UNA entre 2010 y 2015.
Importancia de la gestión de obra artística
Foto Filosofía-UNA
Laura Ortiz C. /CAMPUS
lortiz@una.cr
Durante los días 16 y 17 de octubre próximos, se realizará el evento teórico Arte y patrimonio: coleccionismo, conservación y gestión en el siglo XXI, organizado por la Comisión para la Gestión del Coleccionismo, Resguardo y Conservación del Patrimonio Artístico de la Universidad Nacional (UNA), la Escuela de Arte y Comunicación Visual y el Centro de Investigación, Docencia y Extensión Artística (Cidea-UNA), con sede en el auditorio Cora Ferro Calabrese en Heredia.
Esta actividad se desarrolla en el marco del 50 aniversario de la UNA, con el objetivo de generar un diálogo compartido sobre experiencias, retos y perspectivas de la puesta en valor del acervo artístico en diferentes escenarios públicos y privados, tomando en cuenta las interacciones que este ejercicio potencia entre investigación, estrategias pedagógicas, teoría y praxis creativa e iniciativas de gestión.
Además, se busca colocar en discurso y debate la repercusión de acciones vinculadas con la preservación del patrimonio artístico y cultural en el ámbito de las problemáticas más apremiantes del debate crítico global, lo cual implica reconocer, legitimar y ampliar la visión sobre el rol transformador de estas áreas del conocimiento en la sociedad actual, así como favorecer la identificación, divulgación e impulso de espacios de acción colaborativa, transferencia de conocimiento y desarrollo de proyectos interdisciplinarios de potencial innovador, tanto en el contexto nacional como internacional.
Este evento está dirigido a investigadores, curadores, profesores de enseñanza artística, creadores, historiadores, críticos, estudiantes de arte y gestores culturales, así como a especialistas de otros campos disciplinares con interés en los ejes temáticos que se abordarán:
Si desea participar como ponente en este evento teórico puede enviar su propuesta, antes del 1 de setiembre de 2023, al correo electrónico: cgaa.eacv@una.cr La documentación debe incluir: nombre y apellido del autor (es), grado científico y/o académico, ocupación, institución donde labora o estudia, eje tema tico de su interés, título de la presentación, y un resumen de 300 palabras destacando cinco palabras claves de su enfoque sobre el tema, ciudad, país y correo electrónico.
La presentación podrá ser presencial o virtual.
Universidades públicas consideran que otra vez pierde la educación pública
Gobierno continúa evidenciando grandes contradicciones en materia de la gestión de la educación pública. Foto: Antonio Arroyo
Antonio Arroyo Álvarez / CAMPUS
antonio.arroyo.alvarez@una.cr
El pasado 13 de julio, se llevó a cabo, en Casa Presidencial, la séptima sesión de la Comisión de Enlace, que finalizó sin un acuerdo entre el Gobierno y los rectores de las universidades públicas respecto al 1% pendiente del FEES 2023, evidenciando las grandes contradicciones en materia de la gestión de la educación pública.
El gobierno descartó que existan los recursos para otorgar el 1% que se solicitó para este año, y dejó de lado las tres propuestas concretas y flexibles, que le ofrecían opciones para reconocerlo en tractos, incluso hasta el próximo año.
Ante esta negatividad, el Ejecutivo indicó que la conversación sobre el FEES 2023 está cerrada. Por tanto, el gobierno plantea un presupuesto de 570.438 millones de colones, equivalente al FEES 2023 (₡564.791 millones) más un incremento de un 1% por la inflación. Según comunicado del Conare, “aquí no pierden las universidades públicas, pierde una vez más la educación pública y por lo tanto pierde Costa Rica, porque si el Gobierno no está en capacidad de invertir poco más de 5.000 millones de colones, aún pregonando importantes logros fiscales y reactivación económica, definitivamente la educación pública costarricense pareciera que no es prioridad”.
Para el ministro de Hacienda, Nogui Acosta, “las condiciones fiscales no son buenas desde el punto de vista del espacio que se crea, pues tienen el presupuesto al tope con la regla fiscal y ese 1% implicaría distraer recursos para dárselos a las universidades y eso no permite darles el 1%”, señaló.
Ante este panorama, el presidente del Consejo Nacional de Rectores (Conare) y rector de la Universidad Técnica Nacional (UTN), Emmanuel González, lamentó que no se tomaran en cuenta ninguna de las propuestas, y más bien se planteó un escenario completamente diverso con propuestas que no están articuladas y violentan radicalmente el artículo 85 de la Constitución Política.
Por otra parte, la ministra de Educación, Anna Katherine Müller, insistió que no se trata de un incumplimiento del Gobierno, porque el 1% adicional mencionado en la anterior negociación, era una posibilidad. “El acuerdo era claro, que se vería la posibilidad de darlo, no es de recibo decir que es irrenunciable”, mencionó. Desde el Conare se mantiene la posición que el aumento pendiente del 1% por inflación correspondiente al FEES 2023 es irrenunciable.
“Yo me atrevo a decir que no descarto que esto se tenga que resolver en la Asamblea Legislativa por primera vez en la historia de Costa Rica, muy lamentablemente”, declaró el rector de la UCR, Gustavo Gutiérrez.
Francisco González, rector de la Universidad Nacional (UNA), mencionó que “la misma Constitución Política establece el mecanismo que si no se llega a un acuerdo en la Comisión de Enlace, la Asamblea Legislativa resuelve. Nosotros seguimos pensando y apostando al diálogo para poder llegar a un acuerdo satisfactorio en beneficio de la población estudiantil, en este caso los universitarios, pero es un tema que se valorará con los avances en la negociación”, indicó.
Al final de la sesión, el gobierno y Conare acordaron cuatro citas más en agosto de la Comisión de Enlace, pactadas para el martes 1, jueves 3, martes 8 y jueves 10.
Niños y niñas que construyen paces en la escuela
Antonio Arroyo Álvarez / CAMPUS
antonio.arroyo.alvarez@una.cr
Como parte de los esfuerzos realizados desde el Instituto de Estudios Latinoamericanos de la Universidad Nacional (Idela-UNA), el proyecto de extensión-investigación Comunidades educativas que construyen paz, realizaron durante el pasado mes de mayo un ciclo de talleres lúdicos con niños y niñas de cuarto grado de la Escuela Miguel Aguilar Bonilla, en San Rafael de Heredia, denominado Niños y niñas que construyen paces en la escuela.
Para la académica del Idela y coordinadora del proyecto Evelyn Cerdas, esta iniciativa busca generar procesos pedagógicos para la paz por medio de una metodología lúdica y participativa para la promoción de una cultura de paz.
“El trabajo se realizó con la metodología del proyecto, la cual se basa en el modelo participativo y el enfoque socioafectivo por medio de técnicas participativas y lúdicas, como los juegos cooperativos; esto permite que los niños y niñas compartan aprendizajes, y tengan un espacio de disfrute con el arte, el diálogo, la reflexión y las vivencias con confianza y afecto”, explicó Cerdas.
Los talleres se enfocaron en el fortalecimiento de actitudes y habilidades para hacer las paces en el aula, un proceso que parte del reconocimiento de las capacidades humanas, vivencias y aprendizajes, desde su propio contexto, en este caso, el escolar.
También, el programa implicó que cada niño y niña se mire como sujeto protagonista de la paz en el espacio escolar, en el que pueden construir diariamente relaciones basadas en el respeto, el buen trato, la confianza, la no violencia y el cuidado mutuo; esto a partir de una visión en la cual se consideren como sujetos de derechos con capacidad de reconocer el valor de la otra persona.
Así, con los objetivos de potenciar relaciones amistosas basadas en la no violencia, reconocer el derecho a la paz en las prácticas del buen trato y reflexionar sobre el valor del cuidado de los compañeros y compañeras como práctica cotidiana para hacer las paces, se trabajaron temas como: relaciones pacíficas en el aula, el derecho a la paz y el buen trato, el cuidado como práctica para construir la paz y arte para la paz.
Delmis Patricia Diaz, trabajadora social del equipo interdisciplinario de la Escuela Miguel Aguilar Bonilla, reconoció que este tipo de iniciativas abren las posibilidades para que las personas menores de edad desarrollen competencias y habilidades que les permita en la vida futura enfrentar, gestionar espacios y relaciones interpersonales en forma afectiva, al tiempo que le amplia a los estudiantes la posibilidad de estar en otros ámbitos que le permiten tener experiencias positivas que le fortalezcan el desarrollo personal.
El ciclo de talleres culminó con un encuentro financiado por el Fondo de Beneficio Social de la UNA, en su Centro de Recreo, donde niños y niñas participaron en un taller de arte, compartieron un almuerzo y disfrutaron en las zonas verdes.
Proyecto invita a desarrollar la cultura de paz en los centros educativos.
Foto: Cortesía Evelyn Cerdas
V parte
Víctor J. Barrantes C. / CAMPUS
vbarrant@una.cr
La Comisión de Asunto Sociales de la Asamblea Legislativa continúo, el 22 de noviembre de 2022, la discusión del proyecto de creación de la Universidad Nacional. En esta ocasión el diputado Francisco Morales planteó que si bien parecía haber “un ambiente favorable” en el sector empresarial y círculos universitarios, sobre la creación de la Universidad Nacional, quedaba por precisar algunos aspectos sobre el tipo de universidad que se quería, pues ahí no había coincidencia. A partir del análisis—agregaba el diputado Morales—se proponía la creación de facultades, revisar si los centros regionales iban a seguir haciendo lo mismo: formar profesores, crear un mecanismo para que los decanos no solo velen por su propia facultad sino que prevalezca el sentido de unidad, valorar si se debe—como se lo solicitaron—dar representación a la empresa privada, revisar el régimen de autonomía en relación con la entidad que estaría a cargo de la institución (que en ese momento se planteaba fuera el Banco Nacional); también afinar el tema de las funciones del rector.
En el proyecto original se establecía que los profesores de las escuelas Normal Superior conservarían su condición de profesores de la universidad con el sueldo actual. Al respecto, Morales decía que se cuestionaba si ese profesorado estaba en condiciones para que así, por la vía de un simple transitorio, pueda ascender a los requerimientos de educación de tipo universitario”. También se cuestionaba si la Universidad de Costa Rica se iba a mantener como “un organismo techo”, del cual iban a depender otros organismos de educación superior o, como planteaba otra tendencia, se establecería un sistema de federación de organismos de educación superior, del que emergiera el Consejo o Comisión Nacional de Educación Superior. Finalmente, llamaba a que no se tramitara el proyecto con la celeridad que quería el Ministro de Educación Uladislao Gámez. “Si se va a hacer una universidad, que se haga una buena universidad”, concluía.
En esta misma fecha, quien cuestionó el proyecto fue el diputado Jesús Manuel Fernández Morales. Planteó la necesidad de impulsar una reforma constitucional para garantizar la autonomía de la universidad que se proponía, de manera que no se interpretara que la Constitución Política le otorgaba a la Universidad de Costa Rica el monopolio sobre la educación superior. Y aunque no se oponía, pues él mismo era educador y había respaldado antes la creación del Instituto Tecnológico, consideraba que el proyecto debía ir más allá , pues la propuesta “no es ninguna universidad sino un cambio de nombre” (de Escuela Normal Superior a Universidad Nacional). Criticó también al ministro Gámez, quien—recordó—había sido el principal opositor a la creación del Instituto Tecnológico, junto con la Universidad de Costa Rica. Cuestionaba, asimismo, las capacidades de los bachilleres que estaban terminando la secundaria. Y decía que “si verdaderamente estamos interesados en hacer una universidad la hagamos adecuadamente (…) No le quitemos a las escuelas normales sus rótulos, para decir que ahora se llaman universidades”.
Abejas en la dirección correcta
Laura Ortiz C. / CAMPUS
lortiz@una.cr
El Centro de Investigaciones Apícolas Tropicales de la Universidad Nacional (Cinat-UNA), es un instituto especializado en el estudio de las abejas, sus productos y aplicaciones que mediante la investigación, docencia y extensión, genera y divulga conocimiento para la conservación de las abejas y el desarrollo e innovación de la apicultura y meliponicultura, como actividades de importancia ecológica y socioeconómica en Costa Rica y a nivel internacional.
Recientemente, esta labor fue reconocida en la persona de Johan van Veen con el Premio a la Excelencia Académica APIBA 2023 otorgado por la Universidad de los Andes en Venezuela, en la categoría Autoridad Universitaria, por su labor como director del Cinat-UNA.
“Más que a la dirección, este es un reconocimiento al equipo del Cinat por el esfuerzo que se hace en difundir la investigación. Hoy más que nunca las abejas deben ser protegidas contra el uso desmedido de plaguicidas; investigaciones de nuestros colegas demuestran su clara afectación para ellas y sus colmenas. La fragmentación y la pérdida de hábitat es un factor importante, e iniciamos investigaciones en cómo el clima afecta las floraciones y por ende a las abejas nativas. El resultado de estas investigaciones debe ser el impulso a nuevas políticas públicas para la conservación y protección de la biodiversidad”, dijo van Veen.
Este premio fue diseñado por el Grupo de Investigación con el Laboratorio de Apiterapia y Bioactividad (APIBA) con el apoyo de la Universidad de los Andes de Venezuela. En este se distinguen 15 categorías: Forjador del Premio Mujeres en Ciencia 2023; Autoridad Universitaria; Miembro de Academia Científica; Promoción Científica; Libro; Revista; Difusión Científica Venezolana; Documento Científico; Técnico Especializado; Apicultura; Meliponicultura y Post mortem, entre otros.
En la categoría de Revista se premió a Journal of Apicultural Research, en la cual investigadores del Cinat han realizados publicaciones; además, se reconoció en la categoría Post Mortem a Eva Crane quien colaboró con el Cinat y se dio una mención honorífica a Charles Michener por tener el capítulo más citado en los primeros 10 años del libro Pot-Honey, en el cual académicos del Cinat-UNA también participaron.
Pie de foto: Johan van Veen, director Cinat-UNA. Cortesía Cinat-UNA.
Visita académica refuerza Maestría en Estudios de Cultura Centroamericana
Antonio Arroyo Álvarez / CAMPUS
antonio.arroyo.alvarez@una.cr
La Maestría en Estudios de Cultura Centroamericana (MECC-UNA) organizó una serie de actividades académicas en el marco de la visita del profesor mexicano Jesús Dávila, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), y María de Lourdes Pérez, del Instituto de Artes de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH).
Esta pasantía académica se da gracias a la colaboración entre el Colegio de Estudios Latinoamericanos de la UNAM y la MEEC-UNA, y permite reforzar temas como la literatura, letras, arte y cultura, además de los conocimientos para estudiantes de grado y de posgrado.
Las exposiciones fueron llevadas a cabo en la Facultad de Filosofía y Letras; para los estudiantes de grado de la Escuela de Literatura y Ciencias de Lenguaje, se brindó un curso corto acerca de la narrativa de Jorge Luis Borges, y para los de posgrado se dio una charla sobre la novela Insensatez, del escritor Horacio Castellanos; ambos temas son especialidades del profesor Dávila.
Por otra parte, la maestra Pérez abarcó una conferencia para los estudiantes de posgrado sobre las representaciones del género y la violencia en el trabajo de la artista mexicana de performance Lorena Wolffer. “Estuvimos hablando de cómo la política y el arte pueden comprometerse y hacer un cambio en la sociedad, o al menos buscar una sociedad”, indicó.
Pie de foto: Visita permitió reforzar los vínculos de colaboración para dar a conocer en México la literatura centroamericana. Foto: Antonio Arroyo
UNA analiza la desigualdad
educativa costarricense
Foto: Shutterstock
Luis Benavides Montero/
Para CAMPUS
campus@una.cr
La Universidad Nacional (UNA), con el Centro de Investigación y Docencia en Educación (Cide) y el Instituto de Estudios Interdisciplinarios de la Niñez y la Adolescencia (Ineina), realizaron el 26 de junio un evento virtual para evidenciar los factores que generan y producen la desigualdad educativa.
Para la organización de la actividad titulada Desigualdad Educativa: Un análisis desde las modalidades del MEP y la política educativa, es importante abrir un espacio de análisis y reflexión sobre la realidad que enfrenta el sistema educativo en el contexto actual, marcado por una época post pandemia que magnifica la desigualdad e impacta negativamente a los sectores que viven en condiciones de mayor vulnerabilidad.
Los expositores participantes fueron Roxana Rodríguez, directora del Ineina a cargo de las palabras de apertura y discusión; Cecilia Dobles Trejos, docente investigadora quien presentó Reflexionando sobre las políticas curriculares y su impacto en las realidades educativas, y Diego Conejo, docente investigador del Ineina a cargo de la exposición La desigualdad educativa, el caso de los colegios rurales.
Según las conclusiones de Conejo, a pesar de las revisiones y mejoras a la oferta curricular, la educación rural sigue siendo limitada y no reconoce las particularidades y necesidades locales propias en estas zonas de nuestro país; además, la modalidad de educación rural se desarrolla sobre la base de desigualdades educativas y no ofrece una propuesta que reduzca los factores que históricamente han afectado las zonas rurales. “Es urgente una propuesta educativa transformadora de las realidades rurales, al tiempo que se ofrezcan los recursos y condiciones óptimas para el desarrollo educativo en igualdad de condiciones”, añadió Conejo.
Costa Rica ha contado con cuatro políticas educativas: en 1994 fue la Política educativa hacía el siglo XXI; en 2018 el Centro Educativo de Calidad como eje de la educación costarricense; en 2017 La persona: centro del proceso educativo y sujeto transformador a la sociedad y, por último, ¿La ruta de la educación? Desarrollo de competencias (STEAM)” que se encuentra en discusión.
“Qué estamos entendiendo por la educación, cuál es el punto de partida, es un derecho, una inversión o un gasto. Vemos cómo claramente en este 2023, con más fuerza nos orientamos a esa visión como la educación como un gasto “, destacó Dobles. Los expositores coincidieron en que, a pesar de las promesas para mejorar el sistema educativo, no hay una mejora clara y el no atender los problemas en educación se traduce en un mal rendimiento de los estudiantes.
El valor de la ingesta del agua en la dieta
Johnny Núñez Z./CAMPUS
jnunez@una.cr
El agua es un nutriente esencial que ejerce múltiples funciones en el organismo y una adecuada hidratación es imprescindible para la vida y la realización de los procesos fisiológicos, por lo que una leve reducción en su consumo podrían traer consecuencias para un estado óptimo de salud.
Así lo precisa una publicación realizada por Marcela Alvarez, nutricionista de la Universidad Nacional (UNA), quien explicó que la ingesta dietética de referencia para el agua es entre 91 y 125 onzas de líquidos (2.7 a 3.7 litros) por día para los adultos. Sin embargo, las necesidades individuales dependerán de su peso, edad y nivel de actividad, así como de cualquier afección que pueda tener.
Agregó que el agua hace posible todas las reacciones químicas celulares, desde las productoras de energía a cualquier reacción biosintética (la hidrólisis en reacciones metabólicas,es posible por la presencia celular de este líquido); el transporte de sustancias (nutrientes, hormonas, enzimas y células sanguíneas), así como los procesos de digestión, absorción y excreción, entre otros.
La especialista aseveró que en relación con la regulación de la temperatura del cuerpo, mediante la evaporación del agua por sudoración se consigue mantener una adecuada temperatura corporal cuando esta excede su nivel óptimo, además de la eliminación de sustancias de desecho derivadas del metabolismo a través de la orina, lubrificación de articulaciones y de otros tejidos (jugos gástricos, bilis, saliva).
Preste atención
Álvarez comentó que el balance hídrico se alcanza mediante la modificación de la ingesta y la eliminación de líquidos; sin embargo, pequeñas modificaciones, con pérdidas de peso del 1-2 % pueden tener un impacto negativo en el rendimiento físico y las capacidades cognitivas, al punto que pérdidas del 10% pueden ser incompatibles con la vida. “El organismo no es capaz de almacenar el agua, lo que implica que debe tomarse regularmente a lo largo del día”, subrayó la nutrióloga.
Al respecto, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, por sus siglas en inglés) indica que durante el ejercicio físico, las pérdidas de agua y sales minerales aumentan, por lo que a partir de 30 minutos de ejercicio hay que rehidratarse. Para un ejercicio de intensidad leve-moderada, lo más recomendado es la ingesta de 150 a 250 ml de agua cada 20 minutos desde el comienzo. Además, las pérdidas pueden incrementarse según las condiciones ambientales (temperatura, humedad), la intensidad del ejercicio y nivel de entrenamiento.
En cuanto a los menores de edad, estos son un grupo especialmente vulnerable que necesita proporcionalmente más aporte de agua y líquidos que los adultos, ya que durante la infancia los requerimientos de agua están relacionados con la velocidad a la que se metaboliza la energía alimentaria en el cuerpo (a más energía ingerida, mayor necesidad de agua).
Ante ciertas situaciones como fiebre, diarrea, vómitos o épocas de más calor, niños y niñas requieren una mayor hidratación por ser más vulnerables, por lo que se debe aumentar la ingesta de agua 150 ml/Kg/día.
Pie de foto: La ingesta dietética de referencia para los adultos es de entre 2.7 a 3.7 litros de agua por día. Foto Shutterstock
Fomentan innovación en
PYMES de Pérez Zeledón
Johnny Núñez Z. / CAMPUS
jnunez@una.cr
Bajo el nombre Fomento de la innovación en micro, pequeñas y medianas empresas del cantón de Pérez Zeledón, el Campus Pérez Zeledón de la Sede Regional Brunca de la Universidad Nacional (UNA), con apoyo del Ministerio de Economía, Industria y Comercio (Meic), trabaja desde hace más de un año en una iniciativa que fomenta la innovación en las Pymes del cantón, para mejorar la competitividad, mediante capacitación, asesoría y asistencia técnica.
Sandra Rojas, académica de la Sede Regional Brunca de la UNA y coordinadora de esta iniciativa, comentó que como innovación se espera la introducción de un nuevo producto (bien o servicio), procesos novedosos o mejorados, así como la introducción de un método de comercialización u organizativo aplicado a las prácticas de negocio, a la organización del trabajo y relaciones externas de las empresas.
La segunda etapa, explicó Rojas, se relaciona más con la capacitación, en donde se abordan en la actualidad 30 empresas de la región, como del sector turismo, comercio, software e industrial de diversos tamaños. “El pasado mes de junio realizamos un primer módulo de cinco sesiones, donde se desarrolló el tema de liderazgo para la innovación”, precisó la docente.
La tercera etapa se basa en el entrenamiento a estudiantes para desarrollar capacidades en gestión de procesos de innovación.
Algunos tipos de innovación
Estos son algunos tipos de innovación:
En la actualidad 30 empresas de Pérez Zeledón, en sector turismo, comercio, software e industria, participan de este proyecto de la Sede Brunca. Foto Sede Regional Brunca
Educación comercial ante nuevos desafíos empresariales
El Proyecto Fortalecimiento de la Mediación Pedagógica, de la División de Educología del Centro de Investigación y Docencia en Educación (Cide-UNA), y la Escuela de Secretariado Profesional organizaron, del 21 al 23 de junio, el III Congreso Centroamericano de Educación Comercial, bajo el lema Las universidades públicas contribuyendo con una visión integral, crítica, reflexiva e innovadora de la Educación Comercial en Centroamérica.
También participaron la Universidad Pedagógica Nacional de Honduras Francisco Morazán, y la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua-Managua.
“Esta carrera universitaria de Educación Comercial desempeña un papel crucial en la formación de profesionales capacitados y preparados para enfrentar estos desafíos del mundo empresarial, brindando desde nuestros espacios una educación de calidad, que promueve el desarrollo económico y social de nuestras regiones”, dijo Marianela Rojas Garbanzo, rectora Adjunta de la UNA.
Para María Jesús Zárate Montero, directora de la División de Educología del Cide-UNA, esta es una oportunidad para compartir experiencias y aportes de los países participantes para fortalecer conocimientos en mediación pedagógica, evaluación recursos didácticos, tecnologías emergentes, innovación y tendencias actuales en educación, administración, y finanzas.
De acuerdo con el conferencista principal, Mario Díaz Villa, académico jubilado de la Universidad del Valle en Colombia, quien habló sobre La educación comercial en el siglo XXI, una de las tendencias básicas de la carrera es la pluralidad. “Eso significa que la relaciones entre diferentes sistemas son de integración, conexión y articulación, por lo tanto no podríamos hablar de una tendencia específica de orden disciplinario, sino de una multiplicidad de enfoques que alternan con la manera en cómo el mundo empresarial, financiero o empresarial genera un mercado global. Podríamos decir que no hay una tendencia propia desde el punto de vista económico, sino un conjunto desde lo educativo aunque todas reciben influencia del proceso de globalización que ha penetrado en todas las esferas de la vida cotidiana”.
Pie de foto: Mario Díaz Villa, académico jubilado de la Universidad del Valle en Colombia habló sobre pluralidad de la carrera en el siglo XXI. Foto L.Ortiz.
Foro de gobernanza forestal expone casos
Luis Benavides Montero
campus@una.cr
La Universidad Nacional (UNA) desarrolló, el pasado 19 de junio, el foro Oportunidades de mejora en la gobernanza forestal para la generación de bienestar local, mediante la modalidad virtual, donde expositores y estudiantes compartieron conocimientos en relación con casos de gobernanza forestal que se han presentado en nuestro país.
La actividad fue organizada por el Instituto de Investigación y Servicios Forestales (Inisefor); Escuela de Ciencias Ambientales de la UNA (Edeca-UNA); la Asociación de Ingenieros Forestales y la Oficina Nacional Forestal (ONF).
Víctor Meza, del Inisefor-UNA, hizo la presentación del foro, en el que Karina Murillo, de la misma instancia, analizó las experiencias y las perspectivas de la aprobación de permisos forestales; Juan Arrieta, en conjunto con Ramiro Montoya, de la Edeca-UNA, abordaron las divergencias de criterios en la implementación de las reglas de juego para el control y uso de los recursos forestales; para darle sustento a las teorías expuestas se fundamentaron en 16 casos sucedidos en nuestro país.
Con el fin de analizar las lecciones aprendidas durante el foro y realizar un análisis sobre los puntos de mejora en gobernanza forestal de Costa Rica, el panel de expertos dio su punto de vista. En el diálogo participaron, Xinia Brenes, presidenta de la Unión Costarricense de Ingenieros Forestales (UCIFOR); Nancy Zamora, subdirectora de la Edeca-UNA; Felipe Vega, director ejecutivo de la ONF y Mario Coto, director técnico del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac).
Según parte de las exposiciones presentadas en el Foro, hay cuatro divergencias principales a la hora de obtener un permiso para construcción: los requisitos administrativos, esta situación se da por la falta de coherencia y uniformidad en los procesos y procedimientos administrativos entre diferentes oficinas de una misma organización; la definición técnica de sistemas productivos; definición técnica de áreas de protección y cuerpos de agua; y la carencia de procedimientos para casos específicos. Según el trabajo de investigación de Murillo, el 100% de los encuestados indicó haber tenido divergencias en la tramitación de permisos.
Foto Laura Ortiz
Escuela Agroecológica brinda oportunidades a migrantes
FOTO: CEG-UNA
Johnny Núñez Z./CAMPUS
jnunez@una.cr
Con el fin de que la población migrante tenga oportunidades en el desarrollo local de la Región Norte, y que sobre todo pueda asegurar su alimentación mediante procesos productivos, el pasado 11 de julio se realizó la presentación oficial de la Escuela Agroecológica, donde se realiza un trabajo interinstitucional con la Universidad Nacional (UNA), la fundación Centro de Derechos Sociales del Inmigrante (Cenderos) y la Municipalidad de Upala.
Marisol Amador, directora Ejecutiva de Cenderos, explicó que la Escuela Agroecológica surge a partir de los procesos realizados por la fundación en la zona de Upala, ante la necesidad de fortalecer las capacidades de mujeres y hombres para lograr la soberanía alimentaria desde una perspectiva agroecológica, por lo que es fundamental adquirir conocimientos y herramientas para hacerlo.
Dicha escuela opera en alianza público-privada con la finca agroecológica Vocaré, ubicada en la comunidad Las Milpas de Upala. Ahí la población migrante, en su mayoría mujeres, se capacitan en módulos como: conceptos básicos, abonos orgánicos, suelo, producción pecuaria, plantas medicinales, agroforestería y conservación de forrajes, entre otros.
Yamileth López, alcaldesa de Upala, manifestó que la Escuela Agroecológica es de interés municipal, pues brinda la oportunidad para que diversos grupos organizados del cantón se capaciten, asesoren y compartan saberes, lo que mejora las condiciones sociales y económicas del territorio.
Cabe destacar que mediante un convenio entre la fundación Cenderos y la UNA, la academia aporta el personal docente de acuerdo con la temática que se vaya a impartir.
Apoyo académico
Martín Parada, vicerrector de Extensión de la UNA, destacó la participación del Centro de Investigaciones Apícolas Tropicales (Cinat), el Instituto de Investigaciones y Servicios Forestales (Inisefor), la Escuela de Ciencias Ambientales y la Escuela de Ciencias Agrarias.
Marianela Rojas, rectora adjunta de la UNA, manifestó que este proyecto representa una solución prometedora, al combinar conocimientos agroecológicos con educación y capacitación, lo cual no solo contribuye con la seguridad alimentaria, sino con la generación de ingresos y empoderamiento de los estudiantes en esta comunidad de la Región Norte.
Nuevas estudiantes
En la Escuela Agroecológica participan 30 personas, cuatro de ellas provenientes de las Letras de Guatuso, quienes compartieron con CAMPUS el resultado que esperan obtener una vez culmine su capacitación en la escuela agroecológica.
Pie de foto: Doris, Elizabeth, Maritza y Maureni buscan una mejor calidad de vida al ingresar al proceso de formación en la Escuela Agroecológica. Foto CEG-UNA
Guanacastecos se unen a observatorios ciudadanos del agua
Foto Alianza Nacional de Ríos y Cuencas de Costa Rica
Johnny Núñez Z./CAMPUS
jnunez@una.cr
Como parte de su gestión en procura de la calidad de las aguas, gestión de cuencas hidrográficas, tratamiento y reutilización del líquido vital, el Centro de Recursos Hídricos para Centroamérica y El Caribe (Hidrocec) de la Universidad Nacional (UNA) pone a disposición de los habitantes de la región Chorotega la iniciativa Observatorios Ciudadanos del Agua.
Estos han sido concebidos como una nueva forma de organización social que permite a los guanacastecos, que así lo deseen, participar en los procesos de monitoreo y restauración de los cuerpos superficiales de agua en sus comunidades.
La presentación de este proyecto se realizó en el marco del encuentro UNA Investigación-Extensión: Fortalecimiento a las Comunidades, en el cual se expusieron las iniciativas de estas áreas, con actores sociales e institucionales de los lugares donde impacta la Sede Regional Chorotega de la UNA.
Cristian Golcher, investigador de Hidrocec y académico de la carrera de Ingeniería Hidrológica, explicó que los Observatorios se inscriben formalmente ante la Alianza Nacional de Ríos y Cuencas de Costa Rica y gracias al Hidrocec las personas y comunidades involucradas pueden participar en la obtención del galardón del programa de Bandera Azul Ecológica. “Se ponen en contacto con nosotros, manifiestan su interés y voluntad de integrar un grupo para realizar estas actividades y los incluimos dentro de las acciones de este proyecto”, detalló Golcher.
Participación ciudadana
La idea de establecer los Observatorios surgió a raíz de los monitoreos realizados años atrás por la UNA y el laboratorio de Hidrocec en distintos cuerpos de agua de la provincia de Guanacaste, como lo es el río Liberia, donde desde 2011 se da seguimiento a la calidad del agua según las presiones de las actividades humanas, con la intención de generar información que resulte útil en la toma de decisiones.
“Hemos notado que si bien la información llega a los tomadores de decisiones, quizás no es suficiente; por esa razón estamos capacitando a las personas sobre cómo hacer las observaciones científicas del estado de los ríos, involucrándolos de forma directa en el proceso de registro, análisis e interpretación de los resultados, para que apliquen esos datos en beneficio de su comunidad”, precisó Golcher.
El Hidrocec-UNA es un centro que busca contribuir a la Gestión Integrada del Recurso Hídrico (GIRH) en Centroamérica y el Caribe, mediante la excelencia en la investigación, la extensión, la docencia y la vinculación con todas y todos los actores sociales relacionados con los distintos procesos de gestión, estableciendo alianzas intra e intersectoriales. Sus laboratorios modernamente equipados se inauguraron hace 11 años en el Campus Liberia de la Sede Región Chorotega de la UNA.
El académico agregó que en la actualidad se cuenta con observatorios ciudadanos del agua ya consolidados en Tilarán, Liberia, Nicoya, Nosara y en la cuenca del río Nandamojo, en Santa Cruz de Guanacaste. Foto Alianza Nacional de Ríos y Cuencas de Costa Rica.
Clarita: una maestra rural con corazón UNA
Laura Ortiz C. /CAMPUS
lortiz@una.cr
Cuando Clarita fue a conocer la escuela donde tendría su primer nombramiento, llevaba miles de ilusiones a cuestas. Un día antes de iniciar fue a conocer el lugar y el ánimo se le vino abajo: sintió tristeza, porque encontró una escuela descuidada, sucia, libros y mesas tiradas por todas partes, las mallas estaban llenas de bejucos, “era como si hubiera pasado un huracán”.
El reto no ha sido fácil, luego de seis meses de nombramiento en la escuela unidocente de Copalchí en Cureña de Sarapiquí, aún lucha con el planeamiento y las funciones administrativas pero siempre busca lo mejor para los chicos.
“Es complicado ser docente y administrativo. Yo vivo en Los Arbolitos (Puerto Viejo, Sarapiquí) viajo en la panga que tengo al otro lado del río para poder llegar. Si viajo los lunes me levanto a las cuatro de la mañana para poder llegar, pero es una experiencia muy bonita. Lo hago por los chicos, por hacer la diferencia en ellos, trabajar por ellos, están muy contentos, eso es lo que me motiva a mí y a mi familia por supuesto”, dijo Clara Idalia García Víctor.
Clarita, como le dicen, es bachiller en Educación Rural de I y II ciclos y actualmente cursa la licenciatura y maestría correspondientes a su carrera.
La División de Educación Rural del Centro de Investigación y Docencia en Educación de la Universidad Nacional (DER-Cide-UNA) trabaja desde hace más de 35 años en la formación de docentes de I y II ciclo que conozcan las tendencias de la vida rural y los desafíos que esa realidad presenta a la educación, a fin de concretar una formación comunitaria-ciudadana anclada en la filosofía que caracteriza la esencia de la vida rural.
Valle de la Estrella en Limón; Upala, Guatuso y Los Chiles en Alajuela; Corredores, Coto Brus y Lepanto en Puntarenas; Sarapiquí en Heredia y La Cruz en Guanacaste, son lugares en los que la DER ha dejado su huella en decenas de docentes de zonas rurales.
Existe una brecha educativa entre los procesos formativos que ocurren en zona urbana y los que se desarrollan en comunidades rurales, es por eso que la DER brinda oportunidades de formación a personas excluidas y en condiciones de vulnerabilidad; las zonas que se seleccionan para impartir la carrera corresponden con los cantones con menores índices de desarrollo humano.
De acuerdo con Kenneth Cubillo, director de la DER, la población estudiantil de esta unidad académica está compuesta en su mayoría por mujeres cuyas edades oscilan entre los 19 y 58 años. Un alto porcentaje son padres o madres con más de uno o dos hijos, cerca del 95% de la población de nuevo ingreso es becada y, en su mayoría, tienen más de cinco años de haber salido de la Educación Diversificada.
Según el director de la DER, “es fundamental la formación de educadores inspirados y orientados por la pedagogía desde lo rural, donde se vincula la escuela, la familia y la comunidad, donde se sirve a una escuela rural viva, que demanda mirada con perspectiva histórica, un trabajo pedagógico inspirado en la pedagogía crítica y un poder transformador, entre otras”.
Para Clarita, la formación de la UNA fue una base muy importante, ir a giras y conocer otros lugares. “Fuimos a lugares donde caminamos descalzos, eso me enseñó a ser fuerte y decir: voy a continuar, vamos poco a poco. La Universidad Nacional me deja esa parte humanitaria, el compartir, el dar corazón y vida en cada trabajo”, puntualiza Clarita.
Pie de de foto: Clarita viaja en panga y luego en moto para llegar a la escuela donde es la única docente. Su recorrido tarda alrededor de dos horas. Foto: Cortesía Jessenia Rivera.
Estudiantes de RI-UNA ponen en práctica solución de controversias
Antonio Arroyo Álvarez / CAMPUS
antonio.arroyo.alvarez@una.cr
El ejercicio académico permite el desarrollo de habilidades en resolución de controversias. Foto Shutterstock
Desarrollar habilidades en la solución de conflictos y diferencias en organismos internacionales son parte de las buenas prácticas que se ponen a prueba en el curso Solución de Controversias Comerciales, de la Escuela de Relaciones Internacionales UNA.
El curso, a cargo del académico Gastón Arce, llevó a cabo el pasado 7 de junio un ejercicio de simulación de una reunión del Consejo General de la Organización Mundial del Comercio (OMC), con la participación de 27 países representados por 110 estudiantes del campus Omar Dengo y de las sedes regionales de Nicoya y Liberia, quienes también imparten la carrera.
Durante la actividad en el Edificio de Emprendimiento, del Campus Benjamín Núñez de la UNA, los estudiantes reunidos representaron al Órgano de Solución de Diferencias (OSD) de la OMC, conformando delegaciones a nivel diplomático para conversar, exponer y llegar a un consenso en relación con la problemática de los nombramientos de las personas integrantes del Órgano de Apelación del organismo.
“En la práctica de la simulación, los estudiantes pudieron vivir ese día a día de un conflicto que en este momento se desarrolla a nivel mundial. Poder discutir el asunto y tratar de buscar una resolución a este problema que aqueja el sistema multilateral, es de suma importancia para el ejercicio académico”, concluyó Arce.
Estudiantes imparten talleres de orientación en zona indígena
Laura Ortiz C. / CAMPUS
lortiz@una.cr
Conocer diferentes culturas, tradiciones y formas de vida, es una forma de integrar los conocimientos teóricos, metodológicos y actitudinales adquiridos en las aulas con la realidad, promoviendo un aprendizaje más completo e integrado.
Del 25 al 28 de mayo, estudiantes de III año de la carrera de Orientación de la División de Educación para el Trabajo, del Centro de Investigación en Educación (Cide-UNA), participaron de una gira a la comunidad de Amubri en Talamanca, con el objetivo de desarrollar sesiones colectivas con distintas poblaciones estudiantiles en temas como trabajo en equipo, procesos vocacionales, comunicación asertiva, resolución de conflictos y otros. Esta iniciativa es parte del curso Atención individual en orientación, impartido por Karla Morera Alfaro y Adriana Romero Hernández.
Para el estudiantado esta fue una experiencia formativa enriquecedora, que les dio la oportunidad de ampliar sus conocimientos y desarrollar sus habilidades. “Yo trabajé con materno y estudiantes del colegio nocturno, con los primeros algo general como seguir instrucciones y mantener el orden, y con los segundos la comunicación asertiva y el trabajo en equipo. Tuve la oportunidad de conocer un estilo de vida diferente, entender sus creencias, la manera en que viven y ven la vida”, dijo Ana Sofía Castro Mora.
Para la estudiante Karina Muñoz, esta experiencia cambió su perspectiva del trabajo rural. “Uno cree que son diferentes por su cultura y forma de pensar, pero al final no son tan distintos, enfrentamos los mismos problemas como personas, solo que ellos tienen menos acceso a herramientas o a información para apoyar su desarrollo. Abordamos temas como el bullying, las habilidades sociales y la resolución de conflictos, y con la población adulta hicimos una feria vocacional para que conocieran las oportunidades de becas y opciones que existen en distintas universidades”.
De acuerdo con la estudiante Grecia Villalobos Villegas, en esta zona no están acostumbrados a este tipo de talleres por lo que los participantes se mostraron muy agradecidos con la información. “Ellos lo tratan a uno con mucho aprecio y respeto, entonces uno se siente bien como parte de la formación profesional y ver lo importante que es la orientación y el acompañamiento que podemos dar a personas que no tienen tanto acceso a nuestra disciplina, lo toman muy bien porque ellos igual están expuestos a riesgos a nivel social y tiene necesidades”.
Para Pablo Guerra y Laurence Espinoza, director y orientador respectivamente del Colegio Nocturno de Amubri, los talleres se abordaron con profesionalismo, dejando una sensación de conformidad al personal docente, administrativo y población estudiantil.
Foto Karla Morera
Impulsan transformación digital en región Huetar Norte y Caribe
Johnny Núñez Z./CAMPUS
jnunez@una.cr
Con el fin de promover e incentivar la carrera de Sistemas de Información en la población de las región Norte y Caribe, pero sobre en los estudiantes universitarios, un grupo de expertos de universidades públicas, privadas y de empresarios de tecnologías de la información, participaron a inicios de julio en el I Simposio de Ingeniería en Sistemas.
Con el lema en su primera edición de “Transformación Digital Industrial”, el encuentro se realizó en instalaciones del Sede Regional Huetar Norte y Caribe, Campus Sarapiquí, de la Universidad Nacional (UNA).
La inteligencia artificial es el uso de la computadora para tratar de replicar algunas tareas que normalmente se piensan para los humanos, como aprender y razonar. Ilustración Campus Sarapiquí. Foto Shutterstock
Este encuentro se desarrolló bajo un esquema de intercambio de saberes, mediante plenarias por parte de un panel de expertos que interactuaron con la comunidad estudiantil y el sector empresarial de la zona, en el entendido de que la transformación digital conlleva automatizar los procesos de negocio, así como la prestación de servicios y desarrollo de productos, por lo que es necesario el uso de tecnologías disruptivas que aporten valor al negocio y los mantenga vigente en el sector.
En el acto inaugural Jorge Herrera, vicerrector de Investigación de la UNA, destacó que hasta ahora las lecciones aprendidas han demostrado que la digitalización en el contexto industrial es sinónimo de disrupción de los modelos comerciales existentes, nuevos desafíos de gestión desconcertantes, cantidad de cambios internos y estructurales complejos que afectan a toda la organización y sus operaciones.
Steven Cruz, coordinador de la carrera de Ingeniería en Sistemas de Información del Campus Sarapiquí, explicó que la idea de realizar dicho simposio fue traer a la región Huetar Norte y Caribe conferencistas de alto calibre en el tema de la transformación digital industrial, con el fin de indagar nuevas formas de investigación.
Voces tecnológicas
Mauricio Arroyo, docente del TEC en Cartago, aseveró que “la intención con la transformación digital es una disrupción a la forma en que se hace el negocio, el cual diseña sus productos de una forma u otra con procesos distintos, es ahí donde hay transformación, en cambio sí se pone tecnología en algo ya hecho de la misma manera durante cinco años, eso no es transformación digital es digitalización”.
Oldemar Rodríguez, docente de las escuelas de Informática de la UNA y la UCR, tuvo a cargo la disertación sobre inteligencia artificial y minería de datos. En cuanto a la definición de inteligencia artificial, para el académico vendría a ser aquel computador capaz de hacer deducción, en donde a partir de cierta información pueda responder y generar datos útiles en la toma de decisiones.
Tomás de Camino, académico de la universidad Cenfotec, agregó que para el académico los sistemas modernos con inteligencia artificial facilitan el trabajo que se ha convertido en algo mecánico, por lo que es mucho más eficiente y rápido, donde la persona tendrá tiempo para disfrutar de actividades propias del ser humano.
Transporte y ventanas de oportunidad
Olman Segura Bonilla (*)
olman.segura.bonilla@una.ac.cr
En un estudio reciente sobre Ciudades Inteligentes y Sostenibles (CIS) (Segura, O et al, 2023), la dimensión que mostró el comportamiento más pobre fue la de transporte. La investigación incluyó ocho dimensiones, a saber: Ambiental, Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC), Economía, Gobernanza, Seguridad ciudadana, Capital Social, Educación y Transporte. Comprendió además una batería de 48 indicadores, para evaluar el estado de situación de 10 ciudades conformadas por las siete cabeceras de provincia, más Ciudad Quesada, San Isidro de Pérez Zeledón y San Antonio de Belén.
Llama la atención que la dimensión transporte sea la que muestra el rezago mayor en lo que se califica como ciudad inteligente y sostenible. Una CIS es aquella que utiliza las TIC para hacer que los componentes y servicios de infraestructura críticos de una ciudad-administración, educación, salud, seguridad pública, bienes raíces, transporte y servicios públicos, sean más conscientes, interactivos y eficientes.
La aspiración respecto al transporte es que sea de fácil acceso, con las condiciones adecuadas para personas con necesidades especiales, pago electrónico, sistemas electrónicos públicos de información de horarios y rutas, bajo en emisiones y con posibilidades de intercambio de modalidad.
Las tres ciudades con mejor desempeño fueron San José, Heredia y Ciudad Quesada, pero con tan solo una calificación promedio de 28,57 de 100, dejando en evidencia las problemáticas que se tienen en el país respecto a infraestructura, transporte y movilidad de personas.
La medición se hizo con indicadores tales como cantidad de accidentes de tránsito con víctima en la ciudad, cantidad de sistemas inteligentes de semaforización, cantidad de centros de recarga rápida de automóviles, cantidad de kilómetros de ciclovías, puntos de alquiler de bicicletas, intermodalidad de sistemas de transporte en la ciudad y se le suma la cantidad de toneladas equivalente de dióxido de carbono emitidas por el sector transporte en la ciudad.
Cambio de modelo
Es evidente la urgencia de trazar y ejecutar un cambio de modelo económico y de transporte. La vieja idea de que primero debemos crecer y “luego atendemos los problemas ambientales” debe ser reemplazada por una estrategia que evite el modelo de crecimiento de alta contaminación y que de una vez considere activamente la transformación verde.
En todo el mundo se están impulsando cambios hacia el desarrollo sostenible. Nos encontramos en procesos de transición en los que surgen “ventanas de oportunidad” para acelerar las transformaciones de modelo, y de paradigma tecnoeconómico relacionados en los dominios institucional, de mercado y tecnológico.
Aprovechemos estas “ventanas de oportunidad” e impulsemos las transformaciones del sector transporte en Costa Rica. Por ejemplo, con el pago electrónico utilizando el sistema SINPE-TP, que es la plataforma de pagos del BCCR que ya debería estar funcionando en todo el país. El uso de datos e información del servicio público en tiempo real utilizando Google Maps u otra plataforma, como lo hacen las plataformas de UBER, Didi y ahora taxis. Para este servicio se debe incluir la geolocalización de las flotas vehiculares en sistemas GPS. La flota de buses debería cambiarse al cumplir los 10 años de uso por nuevos equipos que, además, con ciertos incentivos económicos sea preferible el cambio hacia vehículos menos contaminantes, como los eléctricos, aunque desde luego debe aumentarse la cantidad de centros de recarga rápida.
En síntesis, recordemos que la movilidad y el transporte son elementos centrales que favorecen a la fuerza laboral y el desarrollo del país.
(*) Economista y académico CINPE-UNA
Trabajo adolescente en Costa Rica
María Leonela Artavia Jiménez (*)
maria.artavia.jimenez@una.ac.cr
El Código de la Niñez y la Adolescencia define, en su artículo 78, el trabajo como derecho de las personas adolescentes mayores de 15 años, un derecho que solo se deberá verse afectado cuando este exponga a riesgos o peligros que atenten contra la salud mental, física o emocional, o cuando afecte los estudios de esta población.
Es por esto que hay condiciones especiales para el ejercicio del trabajo adolescente, entre ellas, jornadas no mayores de 6 horas diarias y 36 a la semana, igualdad de derechos con respecto a personas mayores de edad, prohibición para realizar actividades consideradas peligrosas (Convenio 138 y 182 de la OIT), cumplir horarios nocturnos, o después de las 22:00 horas en caso de jornadas mixtas, así como tampoco podrán quienes realicen trabajo doméstico asumir el cuidado de personas menores de edad, adultas mayores o con discapacidad, dormir en el hogar en el que labora o realizar labores de vigilancia.
Llama en particular la atención que de las más de 4000 personas adolescentes que se encuentran dentro de la población ocupada, el 51% lo hace como auxiliar no remunerado -mayoritariamente en actividades agrícolas-, es decir, laboran sin remuneración alguna pese a que la gran mayoría dedica normalmente 30 horas o más a la semana a estas tareas. (INEC, 2023)
Pese a la legislación y la ratificación de convenios internacionales, lo cierto es que en el país las condiciones de trabajo de las personas adolescentes usualmente distan mucho de ser de calidad y que raramente se encuentra una conciliación entre educación y trabajo, pues el 70% de los y las adolescentes que trabajan no asisten a un centro educativo (INEC, 2023), por lo que su ingreso a los mercados laborales difícilmente significará un medio de movilidad social.
Ello es relevante debido a que, lamentablemente, la mayoría de las veces las y los adolescentes ingresan a los mercados laborales como parte de un ciclo de pobreza que no logra romperse, al punto que este segmento de población es el que mayor nivel de pobreza registra, con un 14% en pobreza extrema (frente a un 4% nacional) y un 28% de pobreza no extrema (frente a un 11% nacional) (INEC, 2022).
Además, si realizamos un análisis con enfoque de género ubicamos que hay una brecha de ingresos importante para las mujeres adolescentes, quienes trabajan en promedio 15.42 horas en total a la semana, y reciben en promedio 35.992.95 colones de salario mensual, mientras que sus pares hombres registran un promedio de 23.75 horas totales a la semana con una remuneración promedio de 231.692.11 colones al mes.
Otra brecha de género importante se relaciona con el trabajo doméstico no remunerado. En general sabemos que hay una tendencia cultural a que estas tareas pesen más sobre los hombros de las mujeres y las adolescentes no escapan de ello, lo cual es el motivo de no asistencia a la educación formal del 11% de ellas.
Por ello, es tan importante mantener los esfuerzos para que las personas adolescentes continúen estudiando, en especial, aquellas en mayor vulnerabilidad, de manera que el ingreso a los mercados laborales se haga cuando posean un mayor nivel de especialización y así tengan acceso a mejores puestos de trabajo, pues la educación promueve una ampliación y fortalecimiento de sus capacidades humanas y de nuestras libertades.
(*) Académica Escuela de Economía UNA y coordinadora Proyecto de Investigación Trabajo y Crisis
Abelardo Morales Gamboa
Abelardo.morales.gamboa@una.cr
En La mala hora, de Gabriel García Márquez, luego de una guerra civil, la refriega política se infiltra en las cotidianidades, en la esfera íntima y privada de los habitantes por medio de unos pasquines anónimos que relatan infidelidades y traiciones. El relato construye un paralelismo entre narrativas y violencia, asesinatos y venganzas.
Casi sin excepción, podemos trasladar ese realismo mágico a la penumbrosa e incierta cotidianeidad política de las sociedades centroamericanas. Las violencias cotidianas, más allá del adulterio social, en esta región no son meras metáforas, sino acontecimientos que desnudan el asedio de poderes fácticos sobre una comunidad cívica que difícilmente sobrevive a la explotación económica despiadada y a otras injusticias.
Vivir en paz, tener trabajo y bienestar, y decidir su futuro con libertad y autonomía fue la promesa luego de las guerras civiles. Pero en unos países más y en otros menos, élites corruptas han capturado al estado y a sus instituciones, mientras éstas y las mafias vinculadas con el crimen organizado gozan de impunidad.
Bastó para que en las recientes elecciones de Guatemala se insinuara una ligera posibilidad de cambio en la dirección política del gobierno para que esas élites intentaran fraguar una especie de fraude constitucional; mientras tanto, en El Salvador, el régimen de Bukele decretó su intención de perpetuarse en el poder, incluso con la posibilidad de heredarle al país una dinastía como la de Nicaragua. Honduras, por su parte, navega en otras aguas, nada exentas de tempestades. La otrora pacífica Costa Rica no escapa de esa mala hora, especialmente debido a una narrativa gubernamental incendiaria que, al igual que los pasquines, pueden anticipar violencia.
En ese presente sombrío la violencia, los negocios turbios e injusticias, son atizadas por la narrativa del poder que, alejada de la educación y la cultura cívica y democrática, hace una exaltación constante a la desconfianza, al odio y a la venganza. A través de distintas estrategias asoma el autoritarismo y la persecución a la disidencia política y social. Los discursos de miedo y confrontación se proponen confundir, enajenar y desmovilizar a las masas.
Pese a ello, en las elecciones en Guatemala se revelaron tanto la sabiduría como la resistencia de pueblos cansados de la corrupción y del autoritarismo y, desde que el pueblo es pueblo, este siempre tendrá sus oportunidades históricas para encontrar sus propios caminos de transformación y esperanza.
Antonio Arroyo Álvarez
antonio.arroyo.alvarez@una.cr
Para nadie es un secreto que Costa Rica hace rato dejó de ser “el país más feliz del mundo”, no solo en el ranking mundial, sino que queda demostrado cada día cuando vemos la situación real y cruel del país en distintas formas de violencia.
Nuestro “Pura Vida” se nubla con lo que vivimos y esa bonita frase pierde su valor. Un reflejo de lo que pasa en el país queda demostrado en las redes sociales, donde los discursos de odio y discriminación aumentaron un 50% en comparación al último año.
Según el Informe sobre discursos de odio y discriminación 2023, de la Organización de Naciones Unidas (ONU), el país reportó más de 1.4 millones de mensajes y conversaciones en redes sociales de Costa Rica ligadas con discursos de odio y discriminación, en comparación con las 937 mil detectadas en 2022.
¿En qué se ha convertido la sociedad? Tal vez esta pregunta tenga muchas respuestas, pero si de algo estamos claros es que por creer que vivimos en un país con libertad de expresión tenemos vía libre para opinar, argumentar o discutir de cualquier tema, sin importar la forma como se dicen las cosas.
Como dicen, cada cabeza es un mundo y las personas tienen sus propias situaciones y emociones dentro, es aquí donde muchas veces salen los demonios en redes sociales, reflejados en comentarios, discusiones, agresiones verbales, amenazas, entre otros. Sin embargo, estas razones no son justificantes para crear ambientes tóxicos, en lugar de plantear una sana convivencia, donde haya educación que promueva el diálogo, la tolerancia y el respeto por el otro y sus puntos de vista.
Según la ONU, estos son los temas que generan mayor polémica en redes, como la política, realidad nacional, xenofobia, género, orientación sexual, choque generacional, racismo, religión, y la discapacidad; además de los mensajes contra medios de comunicación, periodistas y el periodismo en general.
El hecho de estar escribiendo detrás de un teclado nos da un poder para crear mensajes de impacto que no imaginamos; en este caso, el de dar un mensaje positivo, sin dejarse influenciar por la negatividad y el caos que vive la sociedad.
Seamos agentes de cambio ante el entorno, para poder recuperar esa paz que nos caracterizaba.
36 años de estudios de la mujer en la Universidad Nacional
Fannella Giusti Minotre (*)
fannella.giusti.minotre@una.ac.cr
Hace 36 años, un grupo de valientes y visionarias mujeres se unieron para fundar el Instituto de Estudios de la Mujer (IEM) en la Universidad Nacional, con el propósito de promover la igualdad de género, la justicia social y el empoderamiento de las mujeres en todos los ámbitos de la vida. En ese entonces, su visión era audaz y su trabajo fue pionero en el campo de los estudios de género en nuestra universidad, en el país y en el mundo.
En la década de los 80 del siglo pasado, la ONU hizo un llamado a las universidades, para que contribuyeran con la construcción de instancias especializadas que estudiaran la realidad de las mujeres. Esta invitación generó respuesta en todo el mundo y, en 1987, la UNA creó el Centro Interdisciplinario de Estudios de la Mujer, hoy IEM, convirtiéndose en una universidad pionera en instalar institucionalmente estos estudios en Costa Rica y en Centroamérica.
El IEM en estos 36 años ha realizado investigaciones que han revelado las desigualdades de género y han ayudado a diseñar políticas públicas orientadas hacia la igualdad. Ha ofrecido programas académicos que han formado a generaciones de profesionales. Ha promovido el diálogo y la reflexión a través de conferencias y encuentros que han reunido a personas expertas de diversas disciplinas y perspectivas.
Además, ha desarrollado acciones para avanzar hacia la igualdad de género y la lucha contra la violencia hacia las mujeres en diferentes direcciones; una de ellas es la formulación de políticas universitarias que fueron adoptadas con carácter de obligatoriedad como lo son La Política Institucional contra el Hostigamiento Sexual y la Política para la Igualdad y Equidad de Género en la Universidad Nacional.
Por otra parte, el IEM con la Universidad de Costa Rica da inicio en 1993 a la Maestría Académica en Estudios de la Mujer y, en 2002, a la Maestría en Violencia Intrafamiliar y de Género. Más tarde, se crea una nueva maestría en Perspectiva de Género en los Derechos Humanos, vigente en la actualidad.
El IEM cuenta con una carrera de grado en Género y Desarrollo, que es única a nivel de Centroamérica, y que cumple con la misión del Instituto de formar profesionales que contribuyan en la construcción de sociedades justas, inclusivas y con igualdad de género. Mediante la oferta de cursos optativos en estudios de género, sexualidades, violencias y desarrollo sostenible, también se logra llegar a otras carreras que ofrece la UNA. Paralelamente, se impulsan investigaciones, algunas de forma conjunta con otras instituciones, que aportan a la sociedad en el abordaje de problemáticas como las discriminaciones interseccionales, las violencias de género, la sexualidad, entre otros temas.
El trabajo del IEM ha sido una tarea muchas veces desafiante, pues se ha enfrentado resistencia, prejuicios y estereotipos arraigados en la sociedad. Sin embargo, gracias al equipo interdisciplinario con el que trabaja, al legado de nuestras antecesoras y al apoyo político de algunas autoridades universitarias, hombres y mujeres comprometidas con la igualdad de género han perseverado y logrado avances significativos.
Hoy, la lucha por la igualdad de género ocupa un lugar central en el discurso público y el Instituto de Estudios de la Mujer ha sido un actor clave en este proceso.
(*) Directora Instituto de Estudios de la Mujer (IEM)